Albert Costa se impone en Gstaad

Albert Costa despeja dudas. Su victoria de ayer en el torneo de Gstaad (Suiza), tras batir en la final al ecuatoriano Nicolás Lapenti por 7-6 (7-4), 6-3, 6-4 en 2 horas y 12 minutos, vuelve a situarle en el camino de la victoria y le permite entrar de nuevo entre los 20 primeros de la clasificación mundial. Costa, a quien entrena Josep Perlas, se planteó recuperar un lugar entre los 10 primeros del mundo al iniciar la temporada y pareció en condiciones de poderlo conseguir cuando ganó el torneo de Estoril, el pasado mes de abril. Era un excelente presagio en el comienzo de una temporada de tierra batida que se presentaba abierta para él, puesto que le llegaba en un buen momento de forma. Su juego estuvo siempre ahí. Pero los resultados no. Su mentalidad, o tal vez el exceso de ansiedad por demostrar todo el tenis que lleva dentro, le jugó una mala pasada. No brilló a la altura que se esperaba en los torneos previos a Roland Garros, y en París volvió a estrellarse -tras un gran partido- con el chileno Marcelo Ríos en la tercera ronda.

Sin embargo, ayer se quitó otra espina y dio un paso más hacia el gran éxito al que la calidad de su tenis debe llevarle. "He jugado mi mejor tenis", señaló el leridano, de 24 años, que posee 10 títulos del circuito en su palmarés.

Su triunfo fue el quinto de esta temporada para el tenis español, tras los logrados por Alberto Martín en Casablanca, Albert Costa en Estoril, Félix Mantilla en el Godó y Fernando Vicente en Merano.

En Bastad (Suecia), Juan Antonio Marín (Costa Rica) ganó a Andreas Vinciguerra (Suecia) por 6-3, 7-6 (7-4).