Glamour, todo glamour
JAVIER EDER - ¡Hemingway bendito! ¡Anne Igartiburu y al pie del candelabro! - ¡Santos Judas, Tadeo y Macabeo! ¡Pero si es la vera efigie de Veronica Lake! - Lady Anne, estamos sinceramente conmovidos. Epatés de Foix. La emoción nos embarca en la zodiac con la que surcamos los sanfermines y creemos que nos vamos a desmayar. Lo único, que no sabemos si caer a lo Veronica Lake, a lo Gene Tierney o a lo Lana Turner, así, con muchísima nonchalance. Y decidme, Milady: ¿qué nuevas habéis de la Mazagatos?, ¿os placen estos festejos populares? - Lady Anne, con el corazón en la mano: aun siendo nosotros patanes de rústica condición, la vida nos es más grata desde que Vos, cada día, cuando nos hallamos con la cuchara a la altura del belfo, nos decís por la pantalla: "¡Hola corazones!" ¡Vos y aquí! ¡Vos, con esa ondulación de la melena a lo Veronica Lake, por fin dando brillo y esplendor al glamour de las rendez-vous sanfermineras! - ¿Y Félix Linares? ¿No ha venido? ¡Con lo que ese hombre sabe de glamour! - Amigo Félix, ¡vente a los sanfermines! Un día tendrías que contarnos cómo el gran filósofo Sócrates Aristóteles Onassis flirteó con Veronica Lake, que luego se casó con André de Toth, uno de los tuertos, ¿quién ha dicho que menores?, de la historia del cine. - Es que en la historia del cine el tuerto es rey: Ford, Lang, Hawks, Trueba... todos con el parche de pirata, ¡atención al gazapo!, ¿en qué ojo? - Cómo nos complacerías, Félix, si un día dedicases un programa a todo el glamour de los sanfermines, desde que Ava Gardner se sentó en el Txoko hasta el histórico momento en que la Cantudo se mostró aquí cual su madre la trajo al mundo. Ven, Félix; mira como Anne ha venido. Anne, te querremos siempre. - Eso de te querremos siempre, ¿no era una de Ingrid Bergman? - ¡Premio! ¡Osito de peluche para el caballero! ¡Toca, toca, siempre toca! ¡Si no es una bota, es una alpagarta rota!
