Un muerto y 24 heridos en un atentado con bomba en Turquía
Una persona resultó muerta y otras 24 heridas, cinco de ellas de gravedad, al explotar ayer una bomba que había sido colocada en una papelera en un parque de Estambul, según informó la cadena de televisión de información continua NTV. La deflagración se produjo alrededor de las 21:30 horas, hora peninsular española, en un parque del barrio de Avcilar, en la parte europea de la ciudad, siempre según la misma fuente. Todos los heridos fueron ingresados en centros hospitalarios próximos al lugar de los hechos. Al cierre de esta edición, el atentado no había sido reivindicado. El jefe de la policía de Estambul, Hasan Ozdemir, se acercó hasta el lugar poco después de conocerse los hechos. Este ataque con bomba se ha producido después de que el líder del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Abdala Ocalan, fuera condenado el pasado 29 de junio por la justicia turca a la pena de muerte por traición y por intantar dividir al país.
La semana pasada, cuatro civiles y un policía fueron asesinados en la provincia de Elazig por supuestos militantes armados del PKK después de conocerse el veredicto contra el líder separatista. Dos de los agresores resultaron muertos durante el atentado.
En la provincia de Van (este del país), cuatro civiles y dos policías resultaban heridos en otro ataque. El Partido de los Trabajadores del Kurdistán mantiene desde 1984 una lucha armada por conseguir crear un Estado kurdo independiente en el sureste de Turquía de mayoría kurda. Desde esa fecha, la violencia ligada a esa lucha independentista ha causado cerca de 31.000 muertos.
Tras un periplo que lo llevó a Moscú, Atenas y Roma, Ocalan, conocido por sus hombres como Apo, fue capturado el pasado mes de febrero en Nairobi y trasladado a Turquía para ser juzgado por el Tribunal de Seguridad del Estado, en la isla-prisión de Imrali, en un proceso jurídico que se ha desarrollado sin la presencia de observadores internacionales. Varios países de la Unión Europea manifestaron su rechazo por la pena capital dictada contra Ocalan y han pedido de forma insistente que no sea ejecutada. Las autoridades turcas mantienen que se trata de "un sanguinario terrorista" de 50 años y el ideólogo de una lucha armada cuyo objetivo último es la creación de un Gran Kurdistán.
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