La ONCE podrá participar en el Tour junto a su director, Manolo Saiz
Manolo Saiz, director del ONCE, redactó ayer una carta disculpándose por sus declaraciones en el pasado Tour, paso previo a su readmisión, y hoy viajará a Francia con el resto del equipo. Sin embargo, ayer saltó la sorpresa: Hein Verbruggen, presidente de la UCI (Unión Ciclista Internacional), ordenó al Tour que readmita a Virenque por haber sido excluido fuera de los plazos legales. El Tour contestó con un duro comunicado: acepta la orden, pero la reprueba: "se ha buscado un defecto de forma en perjuicio de la defensa de los valores fundamentales".
Han sido practicamente dos semanas de suspense. Las negociaciones entre la ONCE y la dirección del Tour parecían ir por buen camino hasta el pasado viernes, cuando se produjo un inesperado parón que sembró el pesimismo en el equipo español. Toda la negociación quedó en suspenso y parecía hipotecada alas acciones que habían emprendido Richard Virenque y sus abogados, quienes el lunes pasado tuvieron una reunión con el Comité de Disciplina de la Unión Ciclista Internacional (UCI). Virenque planteó ante la UCI si existía algún impedimento legal para su participación en el Tour, dado que no estaba sancionado deportivamente por ningún tribunal. No hubo información sobre el contenido de dicha reunión, pero ayer se supo su resultado: la UCI, en un comunicado oficial, ordenaba al Tour la readmisión de Virenque por cuanto no se habían cumplido los plazos legales de preaviso para excluirle de la carrera, que son de 60 días ". Y el propio presidente de dicho organismo, el holandés Hein Verbruggen, se ocupaba de hacer público que el Tour había aceptado esa orden y readmitía a Virenque en la carrera. Se producía así un choque frontal entre la reglamentación de la UCI y la voluntad del Tour como organizador. Estaba claro que la UCI había decidido tomar cartas en el asunto y planteaba un pulso al Tour cuyas consecuencias podía ser muy graves: el Tour es un organizador privado, pero la carrera se corre bajo las normas de la UCI y bajo el control deportivo de los comisarios de la UCI. El Tour se arriesgaba a una sanción o, en una posibilidad más grave, a que la UCI decidiera no darle cobertura a la carrera. Avanzada la tarde, el Tour contestaba con un duro comunicado: aceptaba la orden, pero la reprobaba "totalmente". "Se ha utilizado un defecto de forma en perjuicio de los valores fundamentales", reza el texto. El Tour, además, convocaba para hoy a la prensa para exponer su opinión al respecto. El ciclismo suma un nuevo conflicto que añadir a su ya impresionante palmarés.
Esa cuestión dejaba en un segundo plano el caso de Manolo Saiz, que tenía mucha menos importancia para el Tour, proclive a la readmisión por cuanto no tenía mucha base excluir a un director por el contenido de sus declaraciones o de sus críticas a la carrera. El Tour decidió guardar silencio durante unos días para no dar la sensación de que estaba cediendo.
Entretanto, algunos síntomas eran buenos para el equipo ONCE. La organización de la prueba transmitía la composición de los equipos, que a su vez difundía la agencia France Press. En el caso de la ONCE, la composición del equipo incluía la presencia de Manolo Saiz como director.
Redada en Italia
Por otro lado, unos 30 corredores afincados en Italia, además de tres directores deportivos y personal auxiliar de algunos equipos, sufrieron las consecuencias de las acciones de la brigada de estupefacientes de Florencia, Bolonia y Brescia. Agentes de la policía visitaron los domicilios de corredores tan destacados como Cipollini, Savoldelli, Zainza, Ivan Gotti, Pavel Tonkov, Ballerini, Furlan, entre otros, pero la acción policial también llegó hasta la casa de ex corredores como Bugno y Chiapucci. Además, los directores de los equipos Vini Caldirola, Liquigas y Lampre fueron interrogados por la policía. Por la tarde, informaciones de la investigación desvelaban que se habían encontrado frascos con hormona de crecimiento, toda suerte de pastillas, algunas de testosterona, EPO y un producto que puede servir para enmascarar un hematocrito alto. Dichas fuentes no precisaban en qué domicilios encontraron dichos productos.
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