AGUSTÍN ROVIRA ECONOMISTA "Si el ciudadano huye a las grandes superficies la ciudad se deteriora"

Agustín Rovira (Castellón, 1959) es economista y director del Plan Territorial de Comercio de la Comunidad Valenciana, que hace unos años revolucionó el sector de las grandes superficies al propugnar que se limite su avance. Acaba de participar en Vitoria en unas jornadas de la Cámara de Comercio, donde ha señalado que la huida de los ciudadanos a los centros comerciales "deteriora la ciudad y deja obsoletas sus infraestructuras y servicios". Pregunta. ¿En qué consiste el nuevo compromiso entre comercio y ciudad? Respuesta. Se trata de superar la tradicional conflictividad entre las actividades comerciales y las ciudades y transformarla en una relación de compromiso. Esto implica una serie de obligaciones del comercio para la ciudad y viceversa. El ciudadano debe apoyar a su comercio y no huir a las grandes superficies si no quiere que la ciudad se deteriore. P. ¿Qué aporta el comercio a los cascos urbanos para que sea tan importante mantenerlo en esa ubicación? R. Todo. Da vida a la ciudad. Las ciudades de hoy son comercio y servicios, de esto viven. Cualquier ciudad que quiera ser atractiva, competitiva y que quiera progresar tiene que cuidar estos factores. Sin embargo, el ciudadano es libre de elegir y cada vez se mueve más. Ésta es la amenaza: si el ciudadano encuentra ofertas mas atractivas abandonará la ciudad. P. ¿Tras el auge de los centros comerciales, se está produciendo una vuelta al gusto por el pequeño comercio? R. En España vivimos una fiebre por las grandes superficies en los años 80 y, sobre todo, comienzos de los 90. Ahora se están produciendo movimientos sociales que apuntan a una vuelta al comercio tradicional. Esto ocurre sobre todo en sectores de población con mayor formación, gente más comprometida con la ciudad desde el punto de vista de recuperarla y rehabilitarla. P. ¿Qué opina de los cuatro proyectos para abrir grandes superficies cerca de Vitoria? R. No creo que exista una población alrededor de Vitoria tan importante como para admitir cuatro nuevos centros comeciales y mantener el comercio de la ciudad. Si sumamos lo que los ciudadanos de Vitoria pueden gastarse en bienes de comercio al año, la cifra asciende a unos 80.000 millones al año. Si las grandes superficies absorben una parte se la están quitando al casco urbano, ése es el problema. P. ¿Qué consecuencias se derivarán de esta apertura? R. Sería muy perjudicial, supondrá un deterioro para la actividad comercial del centro y para la ciudad. Cuando la actividad comercial se instala en la periferia, surgen problemas de obsolescencia de las áreas urbanas, de los servicios públicos, de las actividades económicas y se produce todo un proceso de deterioro urbano dado que el comercio es el factor que mantiene la vida.