La Guardia Civil denuncia a la mitad de los criaderos de perros por sus deficiencias
La mitad de los 185 criaderos de perros de la región han sido denunciados en una campaña de inspección emprendida a lo largo de los primeros tres meses del año por los agentes del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil). Además del maltrato y el abandono (22 denuncias), las irregularidades más comunes han sido la falta de documentación, la suciedad y la ausencia de sistemas de desagüe y drenaje en las instalaciones. Los dueños de criaderos legales atribuyen las denuncias al intrusismo y denuncian la falta de control de la Administración.
Los objetivos de la Operación Colmillo del Seprona han sido el control de la cría, venta y adiestramiento de los perros y la inspección de los criaderos. La Guardia Civil ha destapado 707 irregularidades en las 185 inspecciones efectuadas. Se da el caso de que en varias perreras se han hallado hasta 30 deficiencias. "Uno de los centros de la sierra tenía 20 jaulas ilegales. Por cada una se le impuso una sanción. En otro criadero, a más de 30 animales les faltaba el microchip identificativo", aclara el Seprona. En las inspecciones los agentes han denunciado a 11 criaderos por maltrato de animales y a otros tantos por abandono. Ninguna de las denuncias han derivado en el cierre de los recintos. "Todas han acabado en sanciones administrativas que se resuelven de forma rápida por los afectados. Es la Comunidad la que resuelve los expedientes", aseguró un portavoz del Seprona. Tan sólo uno de los criaderos inspeccionados ha sido clausurado hasta que subsane sus deficiencias.
Gregorio Sánchez, del servicio municipal de Vigilancia y Control de Animales Domésticos de Rivas, advierte que la mayoría de los criaderos no cumple con las medidas higienicosanitarias preceptivas. "El año pasado, el Ayuntamiento de Rivas cerró un criadero porque no tenía ni agua corriente ni documentación, y además estaba lleno de suciedades", explicó Sánchez. "La mayoría de los criadores tiene las jaulas en sus casas y carece de los permisos necesarios. Explotan a las perras. Las hacen criar a una media de dos veces al año para hacer negocio. Venden muchos cachorros y a precios caros", añade.
"Cualquiera es criador"
Pilar Moreno, del Centro Canino Frajamo, afirmó ayer que su criadero cumple con la ley y critica que "ahora cualquiera se considera criador". "Levantan un chiringuito y ahí meten los canes. La Administración tiene parte de culpa porque no ha hecho nada hasta el momento", añade. Ignacio Arias, de Can-Hotel, denuncia que los criadores clandestinos dan mala imagen y les quitan clientes. "Legales hay muy pocos. Recomiendo que se visite el lugar antes de dejar al perro", dice.
La Guardia Civil ha denunciado tres peleas de perros en un centro canino de Majadahonda. La infracción la cometieron cinco jóvénes que fueron detenidos por meter en una jaula a dos perros para que lucharan. En 1998, la Guardia Civil recibió 38 denuncias de personas que han sido víctimas de ataques de canes.
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