La oposición dice que el club actualmente produce tristeza

La crisis interna del Real Madrid (el pulso lanzado por una parte de la directiva: o Juan Onieva, vicepresidente económico, deja el cargo o se convocan elecciones; y la respuesta firme del presidente, Lorenzo Sanz, en defensa de la otra parte de la junta), desató todo tipo de reacciones dentro y fuera del madridismo. Conocidos integrantes de la oposición al actual grupo gestor del club no tardaron en pronunciarse. Habló, por ejemplo, Ramón Calderón, el portavoz del grupo que encabezaba Florentino Pérez en las últimas elecciones a la presidencia de la sociedad en que hubo más de una candidatura. "La situación, una vez conocidas todas las opiniones, es ahora mismo más grave de la que cualquiera se hubiera imaginado", declaró a Efe. "No se avecina nada bueno", añadió Calderón, "la imagen que está ofreciendo el Real Madrid produce tristeza. Parece evidente que esta junta va a causar un mal irreversible. Una junta con cuatro directivos nuevos no va a funcionar. Lorenzo Sanz debe aclarar puntos oscuros de su gestión, como el asunto de las bolsas con dinero negro, la reventa organizada. El socio debe saber lo que ha ocurrido en la entidad". "La historia y el prestigio del club", insistió, "no merecen este espectáculo. Esto es una novela policiaca por entregas". Calderón fue aún más lejos: "Yo creo que Juan Onieva prepara un asalto al poder, y que Lorenzo Sanz, que parece listo, lo permite".

Otro socio de la oposición, Juan Miguel Villar Mir, que también participó inicialmente en pasadas elecciones a la presidencia del Madrid y fue directivo del club, declaró a Marca: "Todo esto es una gran y desagradable sorpresa para mí. No quiero crear discordias, pero durante todo este tiempo he vivido una pesadilla viendo cómo se hacían las cosas mal, el descontento del socio, conflictos internos, mala gestión...". Villar Mir no descartó presentarse a las elecciones si finalmente los ocho directivos que pidieron el cese de Onieva consiguieran convocarlas.

Jesús Gil, perplejo

Por su parte, Jesús Gil, el propietario del Atlético de Madrid, también se refirió ayer a la crisis de su vecino. Y pese a ser un personaje acostumbrado a participar permanentemente en el más difícil todavía, no pudo ocultar perplejidad. "Es difícil de entender lo que está ocurriendo en el Real Madrid. Son cosas muy personalistas. Pero creo que lo que está sucediendo no es bueno para el fútbol. He oído que hay un golpe de estado, pero tampoco sé quiénes son los golpistas". Gil, por último, aludió a las ventajas que en su caso reporta el no tener competencia dentro del club, el ser el dueño. "Aquí es metafísicamente imposible que ocurra lo que ha pasado en el Real Madrid", comentó orgulloso.