"Sin sanear las finanzas, no puede hablarse de proyectos"

Luisa Fernanda Rudi ganó para el al PP en 1995 la alcaldía de Zaragoza, gobernada por el PSOE desde la reinstauración de la democracia. Entonces logró el 47% de los votos y ahora piensa reeditar su victoria. Niña mimada de Manuel Fraga y una de las favoritas de José María Aznar, su padrino de boda, asegura que ha hecho una apuesta por la capital aragonesa y que no piensa regresar al Congreso de los Diputados, en el que llegó a ser vicepresidenta segunda de la Comisión de Economía y Hacienda y miembro de la Mesa. Pregunta. Se dice de usted que es honrada, pero también distante. Respuesta. Lo de distante se dice de mí no desde que estoy en la política, sino desde siempre. Pero luego terminan reconociéndome que no es así. Tal vez es que como soy alta y miope...P. ¿Se viene rozando más con la gente en esta campaña?

R. ¡Me rozo con la gente! Pero no soy demagoga. Es muy fácil verme tomando vinos con mi marido y mis amigos o comprando. Eso es normalidad, no es populismo.

P. El triunfo de 1995 le puso el listón muy alto.

R. Sí, pero el balance que presento merece revalidarlo.

P. Entonces se comprometió a quedarse en Zaragoza. ¿Y ahora?

R. Aquí estoy. Nadie lo creía, pero dije: "Vengo a ganar y gobernar". Sigo diciendo lo mismo. Me satura que siempre digan que voy de tirón y que lo dejaré.

P. ¿Ha perdido influencia por quedarse?

R. Sonrío cuando oigo decir a [Juan Alberto] Belloch [el candidato del PSOE] que Zaragoza necesita un alcalde con peso nacional. No sé cuál es mi peso. Pero si en tantas quinielas he estado... Si repaso su trayectoria y la mía, lo tengo muy fácil. Esta ciudad ha visto licitarse en el BOE, con el Gobierno de José María Aznar, obras por valor de más de 45.000 millones de pesetas. ¿Cree usted que eso se habría licitado si hubiese un alcalde con poco peso? P. ¿Le gusta Zaragoza?

R. Claro. Tengo aquí mi casa desde los tres años. Me gusta el clima de sus gentes, la ciudad tradicional, ir de vinos por el casco, perderme paseando...; recuperar calles del centro histórico o el patrimonio, como hacemos, y las zonas de expansión, que hablan de su calidad de vida y su futuro.

P. ¿Un alcalde es gestor o impulsor de ideas?

R. Las dos cosas, aunque luce más impulsar ideas. Pero sin gestión las ideas no se pueden desarrollar. Debe ser un cóctel que no sé en qué dosis debe mezclarse. Es más fácil ser impulsor

P. También se le reprocha que vive obsesionada por la economía y que no ha proyectado nada.

R. ¡Qué poco original! La situación de este Ayuntamiento era crítica. Lo sabía todo el mundo. Ha hecho falta esfuerzo, ya lo avisé, para ordenarlo. Era el penúltimo por su situación económica. Hoy los expertos dicen que mejora. Es una labor oscura. Me ha quitado horas de sueño. Pero no podría hablar de proyectos y acometer el futuro sin la economía saneada. Hablo de las rondas y los puentes que vendrán ahora.

P. Su plan tiene, pues, dos plazos. ¿Invertirá a partir de ahora?

R. No habría obras en marcha si no hubiese capacidad financiera. Quedan cuatro años con un horizonte despejado que sería imposible sin lo anterior. Dije que había que poner cimientos para construir la casa. Los hemos puesto y hemos hecho el primer piso. Quedan el segundo y la azotea.

P. La lista municipal la hizo usted. La exclusión del concejal de Cultura, un independiente, y el mantenimiento de algunos otros ha sorprendido.

R. Lógicamente, yo he decidido en una parte importante. En un ayuntamiento la lista es el equipo de gobierno. Hay que confeccionarla para que salga bueno. P. Se comenta que que no le interesa la cultura, que no conoce nada de las corrientes actuales y que Zaragoza ha perdido en ese campo.

R. Hay que decirlo con datos. El Auditorio ha sido escena de conciertos de primera fila, el teatro Principal ha estado siempre activo. Los músicos modernos han venido. Las exposiciones han sido punteras.

P. ¿Qué proyectos tiene y por cuál le gustaría ser recordada?

R. No sueño con obras faraónicas. Me gustaría que el teatro Romano sirva para definir la ruta romana como arranque de nuestro futuro turístico. Demostrará el peso que tuvimos. También, abrir calles en barrios. Me gustaría que me recordasen como una persona honrada que hizo lo mejor que supo, no como una vendedora de humo porque yo no lo vendo.

P. No tiene proyectos, según la oposición.

R. Prometer es fácil. Toca arreglar las tuberías. Porque no se puede encarar el siglo XXI con las infraestructuras podridas. Hay que desatascar las rondas de circunvalación y garantizar el agua de calidad con los proyectos de la Loteta y el recrecimiento de Yesa; renovar la infraestructura ferroviaria. Es la unica forma de desarrollar nuestra potencia y ser de verdad los líderes del valle del Ebro.