España se estrena hoy frente a Argelia

El anhelo se basa esta vez en la consciencia de que el equipo que ha seleccionado Juan de Dios Román es fortísimo. España inicia hoy el Mundial de balonmano frente a Argelia (20.30, hora española, transmitido por La 2) entre los grandes favoritos. El seleccionador podrá afinar sus abundantes recursos durante la liguilla de la fase previa en un grupo bastante cómodo.

El caos general de Barajas y el específico de la compañía griega Olympic Airways obligaron a modificar los planes iniciales tras un viaje agotador, que terminó a las 04.00 de ayer en un hotel de El Cairo. Román canceló el entrenamiento matutino y logró que la selección no acudiera a la ceremonia inaugural. Tres de los cinco rivales de España en el grupo A son africanos (Argelia, Marruecos y Túnez) con un estilo común: defensa pegajosa y embarullada, casi inconcebible en Europa. "La movilidad y la imaginación son claves para triunfar con holgura ante un sistema tan heterodoxo. Para ello podemos alinear a dos centrales cuya habilidad puede hacer estragos", explicó el seleccionador. De paso, esa táctica tiene otros dos fines: dar rodaje a Duishebáiev, un virtuoso en baja forma por las lesiones, y probar un buen antídoto contra el único defecto visible de la selección, la ausencia de cañoneros a larga distancia. Garralda es quizá el único español que se acerca a ese perfil, pero Román no le ha elegido porque cree que sus carencias pesan más que sus virtudes. Su puesto, lateral derecho, está ocupado por Urdangarín y Mariano Ortega. Frente a los sistemas muy elaborados de los franceses, la disciplina de los rusos y la piña que forman los maestros suecos, la fortaleza de España se basa en una defensa férrea que origina contraataques fulgurantes de los extremos Guijosa, Ugalde, Antonio Ortega y Urdiales. Al atacar, Román da mucho margen a la creatividad individual, facilitada por dos pivotes muy corpulentos, Shepkin y Juancho Pérez. La ilusión, pues, está justificada.