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"Los populares han sido malos socios al aportar sólo sus crisis"

Tras dirigir el todopoderoso Servicio Canario de Salud, Román Rodríguez es el candidato de CC a la presidencia de Canarias.Pregunta. Con la retirada del actual presidente, Manuel Hermoso, CC pasa una página del nacionalismo conciliador. Se anuncia que usted lo endurecerá.

Respuesta. Somos aún un proyecto joven. En estos seis años ha quedado claro que CC abandera un nacionalismo muy escrupuloso en el respeto a la Constitución, aunque abogamos por una interpretación más flexible de la misma. No buscamos la diferencia gratuitamente. Pretendemos que Madrid dé respuestas a una realidad diferente. Demandamos que nuestras posibilidades de movernos, crear riqueza o encontrar empleo no se vean condicionadas por los factores geográficos. Puede que seamos un nacionalismo desconcertante porque, desde la profundización en nuestra identidad, lo que perseguimos es la igualdad. Exigimos a Madrid respeto mutuo. Que se entienda que aquí los servicios públicos son más caros y se requiere una sensibilidad presupuestaria especial.

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P. Luego...

R. Si algún cambio puede esperarse respecto a la etapa de Hermoso ha de pasar por incrementar la firmeza frente a Madrid. Su balance indica que hemos mejorado en todos los campos, pero queda mucho camino. Atrás quedan los años en que suplicábamos inversiones o actuaciones. Ya hay consciencia de lo que somos capaces. Hemos superado viejos complejos. Ante la Administración central no hay que tener una actitud pedigüeña, sino exigente.

P. Hay quien le recuerda sus turbulentos años universitarios, incluso algún contacto con movimientos radicales vascos.

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R. ¿Quién no fue rebelde en los 70? Asumo, y me enorgullezco de ella, la actitud defendida en unos años en que todas las libertades sabían a poco. Hay que situar las cosas en su tiempo.

P. Muchas voces han tachado de "tibia" la posición de CC en el desarrollo de los acuerdos con el PP para apoyarle en la gobernabilidad del Estado. ¿Se han ganado los populares ese respaldo?

R. Sería de hipócritas no reconocer que estamos satisfechos con sus resultados. Se ha cumplido el 100% de nuestras peticiones, lo que ha garantizado a José María Aznar la ayuda de nuestros cuatro diputados. Hemos sido los nacionalistas los que hemos centrado al Gobierno y al PP. Con una mayoría absoluta de los populares, otro gallo habría cantado a este país.

P. Menos idílicas parecen sus relaciones en el archipiélago.

R. La cara y la cruz. El PP canario es una formación construida corriendo y mal para aprovechar las mieles del empuje de 1996. Aquí es un partido sin tradición. A sus dirigentes apenas se les conoce o entiende y en algunos casos no tienen experiencia política y, además, hacen gala de un déficit democrático. Han sido unos malos socios porque sólo han aportado una sucesión de crisis que les ha obligado a cambios constantes en sus consejerías.

P. ¿Está el nacionalismo en el tejido social canario?

R. Somos más que los catalanes o los vascos. Hasta el 65% vemos necesaria la existencia de una fuerza nacionalista. Que en seis años nos hayamos convertido en el proyecto más respaldado no es fruto de la casualidad.

P. ¿Ha tocado techo el autogobierno o restan competencias que reivindicar?

R. Falta aumentar las inversiones y las mejoras en infraestructuras, amarrar nuestras especificidades fiscales en la UE y asumir la responsabilidad en materia aeroportuaria. Repito que hemos avanzado en el autogobierno, pero queda camino por recorrer.

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