"Los títulos hablan de nuestra grandeza"

Día de récords para el club -cuatro títulos en el año del centenario-, para el presidente -121 campeonatos en 21 años-, para el entrenador y para el capitán del Barça. Van Gaal sumó su victoria número 45 en 73 partidos, un porcentaje del 61% que le convierte en el técnico más efectivo del fútbol español, un punto por encima de Cruyff. Y Pep Guardiola reunió su sexta Liga, igualando a Antonio Ramallets, él más laureado."Los títulos conseguidos este año explican la grandeza del Barça", argumentó Van Gaal. "Por eso fiché por este club, porque reúne todas las condiciones para trabajar".

El técnico compartió la alegría, un triunfo histórico -"es increible ganar dos Ligas seguidas en las dos primeras temporadas"- con todos los representantes de la entidad -"a mi me corresponde sólo tomar las decisiones a final de semana"-y sólo criticó la actitud de la prensa, aunque con un tono más amable que de costumbre: "Yo quiero que la prensa escriba hechos, pero optan por criticarme y no cuenta la verdad. Pero lo que a mi me importa es la gente, y la gente por la calle me anima". "En Holanda no estamos tan acostumbrados a las críticas personales", intervino Truss, la esposa de Van Gaal. "En Barcelona, la gente es más emocional".

Van Gaal asumió que el objetivo para la próxima temporada es la Liga de Campeones, "aunque será muy complicado". "Lucharemos por todos los títulos posibles y para dar más espectáculo, pero eso depende delos jugadores".

Los jugadores, de momento, sólo hablan del presenten y festejan el triunfo. "La memoria es muy selectiva y no es momento para acordarnos de lo malo sino para disfrutar", comentó Guardiola. "Nuestra virtud", agregó Sergi, "es que siempre rendimos al máximo".Y Rivaldo terció: "Logrado el bicampeonato, ahora quiero ir a por el Pichichi".

Los jugadores, cuya actitud fue reprochada por Julio Salinas -"nos hemos sentido humilldos con su manera de celebrar el título"- regresaron anoche a Barcelona y fueron recibidos por una multitud de aficionados que primero llenó la Rambla de Canaletas y luego acudió en masa al aeropuerto del Prat. La fiesta proseguirá el lunes con el ofrecimiento de trofeos desde la Plaça de Sant Jaume.