Los eurodiputados españoles cobrarán el doble al igualarse todos los sueldos

Los eurodiputados españoles cobrarán en la próxima legislatura más del doble de lo que perciben ahora, al igualarse los sueldos de todos los miembros del Parlamento Europeo. Así lo han decidido los quince ministros de Asuntos Exteriores, que han aprobado un salario único de 5.677,22 euros mensuales (casi 950.000 pesetas). Hasta ahora, los sueldos estaban equiparados a los de los diputados nacionales, por lo que los españoles eran los peor pagados. Cobraban, por ejemplo, cuatro veces menos que un italiano.

El nuevo estatuto del eurodiputado aprobado por los ministros de Asuntos Exteriores intenta acabar con una clara desigualdad. Un eurodiputado español cobra igual que los demás parlamentarios nacionales: unas 410.000 pesetas, dietas aparte. Por contra, los diputados italianos, los mejor pagados de Europa, cobran alrededor de 1.500.000 pesetas mensuales. Esto significa que, con el nuevo sueldo, los españoles pasarán a cobrar más del doble de lo que percibían antes, mientras que los italianos tendrán que aceptar una reducción considerable de sus salarios con respecto a sus compañeros en las Cortes de Roma. Además de unificar el salario de los eurodiputados, el nuevo estatuto hará que dejen de depender completamente de sus Parlamentos nacionales. Hasta ahora, las Cortes de cada país no sólo se encargaban de pagar a sus eurodiputados, sino que además los sometían al mismo estatuto que los parlamentarios nacionales.

El salario de los eurodiputados españoles siempre ha sido considerado bajo, teniendo en cuenta que el nivel de vida en España no es el mismo que en la capital de Bélgica, Bruselas, o en Luxemburgo, donde desempeñan su trabajo.

Para corregir las diferencias de sueldos, el Parlamento Europeo había establecido una serie de dietas y gastos para los asistentes de los eurodiputados, complementos que en algunos casos eran utilizados como compensación.

Las dietas suponen, según un documento del Parlamento Europeo, unas cantidades mucho mayores que los sueldos. Una de las partidas más importantes es la que se concede para que los eurodiputados contraten a uno o más asistentes: 9.559 euros mensuales (casi 1.600.000 pesetas). Esta asignación se ha considerado en ocasiones como un sobresueldo por el escaso control que hay sobre ella.

En concepto de dietas propiamente dichas, es decir las asignaciones que cubren los gastos de la asistencia a un pleno, incluidos alojamiento y comidas, los eurodiputados cobran casi 40.000 pesetas diarias. Otra partida importante es la destinada a mantener en marcha sus oficinas: 3.314 euros mensuales (más de 550.000 pesetas). Si los europarlamentarios no acuden a la mitad de los plenos sin causa justificada, se les puede retirar esta cantidad.

Además de todas estos gastos, el Parlamento Europeo cubre todos los costes de viaje para desplazarse a las sesiones plenarias o a las comisiones en la que participen los diputados, y asigna un presupuesto de 3.000 euros anuales (casi 500.000 pesetas) para viajes extraordinarios, como pueden ser el tener que desplazarse a cualquier país del mundo para dar una conferencia.