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El Consell

JOSEP TORRENT Eduardo Zaplana está tan convencido de su victoria en las próximas elecciones autonómicas que ya trabaja sobre el que será su futuro gobierno autonómico. En los papeles que se manejan en los despachos de Presidencia empieza a configurarse un organigrama que tiene como principal novedad la creación de una vicepresidencia del Consell que, aunque pudiera parecer lo contrario, no estará ocupada por el hipotético delfín que vendría a sustituir a Eduardo Zaplana cuando éste concluya su segundo mandato al frente de la Generalitat. El líder del PP valenciano trabaja ahora mismo en dos frentes: partido y Gobierno para llevar adelante la que sería la auténtica renovación de su formación política. Los rumores apuntan a una salida de José Luis Olivas de la secretaría general del partido que sería compensada por la vicepresidencia del Consell, en lo que sería una repetición de la jugada que Aznar le hizo a Álvarez Cascos. Fijos en la quiniela sólo están, amén del consejero de Economía que sería sustituido por Juan Costa, Martínez Pujalte o González Cepeda; García Antón, el incombustible Joaquín Ripoll y Manuel Tarancón que se prodiga en guiños y gestos blaveros para hacer imposible el rebote hacia el sillón de presidente de la Acadèmia. El resto, a ventilársela como puedan. Eso por lo que hace al Consell. Respecto del partido, los cambios más importantes afectarán a los presidentes provinciales que perderán poder orgánico y territorial. La medida parece estar pensada especialmente para Carlos Fabra, el único virrey provincial que Zaplana no acaba de controlar del todo, y para reforzar aún más el poder absoluto del presidente regional de los populares. La confianza en la mayoría absoluta es tal que en la próxima legislatura, a diferencia de la actual, todos los consejeros mantendrán su escaño en las Cortes Valencianas y ya se piensa en quién va a presidirlas. Como los rumores son libres, apunten un nombre que empieza a sonar: María Angels Ramón-Llin. Lo tiene casi todo, experiencia parlamentaria, es independiente y, además, mujer. Un chollo.

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