El Segura es apto para los cultivos, según técnicos, políticos y regantes
Por activa y por pasiva, y hasta la saciedad, la Comisión Provincial del Agua de Alicante certificó ayer que las aguas del Segura son aptas para el riego de cultivos. Aunque existe contaminación orgánica y tóxica, los agentes en suspensión no sobrepasan los niveles mínimos aconsejados por la Organización Mundial de la Salud, y por tanto el uso agrícola del agua no entraña peligro para la salud humana. El catedrático que hizo el informe contrario al riego reconoció ayer que no hizo él los análisis.
A los habituales integrantes de la Comisión del Agua se sumaron ayer, citados por vía de urgencia por el presidente de la Diputación de Alicante, Julio de España, alcaldes de poblaciones de la comarca de la Vega Baja por donde discurre el Segura, técnicos de la Universidad Miguel Hernández, representantes de organizaciones agrarias, el presidente de la Confederación Hidrográfica y hasta el Síndic de Greuges, que tramita varias quejas sobre el caso. A la reunión siguió una multitudinaria rueda de prensa en la que todos los participantes se esforzaron en desautorizar la investigación realizada por el catedrátrico Manuel Nieves, integrante de la división de Edafología y Química Agrícola de la Universidad Miguel Hernández, en cuyo informe alerta sobre las elevadas dosis de cadmio en suspensión en las aguas del río. Ese documento, en poder de la Comisión Europea, puede acarrear una denuncia a España ante el Tribunal Europeo, y desde su publicación en las páginas de EL PAÍS ha desatado una fuerte polémica de ignoto desenlace. Instituciones públicas y colectivos agrarios calificaron el trabajo de "alarmista", e incluso se anunciaron acciones judiciales por las consecuencias negativas que ese informe podría acarrear a las exportaciones de hortalizas de la Vega Baja. En el terreno político, subyace la intención de frustrar una alta participación en la manifestación contra la degradación del río convocada por diversos colectivos ciudadanos de Alicante y Murcia en Madrid, para el próximo 9 de mayo. El catedrático Jorge Mataix, jefe del mismo departamento universitario, aseguró que Nieves utilizó para su estudio parte de la analítica que realiza un equipo dirigido por él para emitir un informe completo que verá la luz en julio. No será hasta el verano, sin embargo, cuando se sepa con certeza si los niveles de cadmio en las aguas del Segura entrañan peligro. Pocas veces se asiste en Alicante a una reacción tan homogénea. Políticos, técnicos y agricultores debatieron durante más de dos horas con el profesor Nieves. El propio catedrático reconoció, según los asistentes a la reunión, haber utilizado para su trabajo análisis ajenos, desconocer los lugares del muestreo, metodología e instrumental utilizado, aunque ayer no participó en la rueda de prensa para emitir públicamente su opinión.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.