Industria recurre la suspensión y la oposición aplaude la medida porque los Nova "son una fiesta del PP"

VIENE DE LA PÁGINA 1 La Junta basa la suspensión en el artículo 20 de la Ley Electoral General 1/87 de 31 de marzo, y en los artículos 50, 51 y 53 de la legislación electoral valenciana, donde se regulan las campañas que los organismos públicos programan en campaña electoral. El proceso se desencadenó a raíz de la consulta realizada por la Consejería de Industria a la Junta Electoral sobre la idoneidad de la campaña publicitaria diseñada para promocionar la gala de este año, campaña, por cierto, que se emite desde hace días por radio y televisión. El órgano electoral respondió la pasada semana que lo que no podía celebrarse es la gala, instituida por el PP nada más acceder al Gobierno de la Generalitat en reconocimiento a la labor empresarial. La decisión sorprendió a los promotores, que tenían practicamente ultimados los preparativos de la fiesta. Incluso se barajaba la posibilidad de que la top model española Esther Cañadas asistiera, tras el intento frustrado de la anterior edición, a la gala, que este año incluía un desfile de moda infantil. La cifra de invitados al evento, retransmitido por Canal 9, era astronómica y superaba el millar de personas. Nadie cuantificó ayer el coste económico de la suspensión. Las reacciones llegaron ayer de los más diversos ámbitos. La portavoz parlamentaria de EU, Glòria Marcos, calificó ayer de correcta la decisión de la Junta porque su partido ya había denunciado que los Nova, más que un premio a la innovación, eran un despliegue de imagen del PP. "En el fondo, desde su primera edición, los Nova ha sido una fiesta del PP pagada con fondos públicos". En círculos empresariales, la suspensión causó gran malestar. De hecho, el presidente de la patronal autonómica Cierval, José Luis Montes Tallón, pidió a la Junta que reconsiderase su decisión. Portavoces de otras empresas como Chocolates Valor o SOS Arana se pronunciaban en parecido sentido.