_
_
_
_

Sólo 7 de cada 100 vuelos salieron en hora de Barajas

Encontrar ayer en los paneles del aeropuerto un vuelo que saliese a su hora se convirtió en todo un ejercicio de agudeza visual. De cada 100 vuelos, 97 despegaban del principal aeródromo español con retraso. Las demoras alcanzaron en algunos casos las diez horas, aunque la media rondó los 40 minutos, según fuentes de AENA, que, para elaborar estas cifras, incluye los vuelos que aterrizan en Barajas y que, por tanto, no sufren el colapso aeroportuario habitual al proceder de otros aeródromos. El puente aéreo a Barcelona fue una de las vías más afectadas por la congestión. Por ejemplo, el IB2600, que debía salir a las 12.30, lo hizo a las 16.50. PASA A LA PÁGINA 9

80 pasajeros de un vuelo se encierran en un avión tras seis horas de espera

VIENE DE LA PÁGINA 1 Según los datos que el Ministerio de Fomento ofrece en su página web de Internet (www.aena.es), en el día de ayer se cancelaron cuatro vuelos a Barcelona y otros cinco a distintos puntos de España. La demora media que sufrieron los pasajeros del puente aéreo, según los cálculos efectuados por este periódico con la información de la web oficial, fue ayer de 55 minutos.

Al cierre de esta edición, los 80 pasajeros del vuelo JKK 659 de Spanair con destino a Asturias denunciaron que se habían encerrado en el avión y que pensaban pasar la noche dentro de la nave. Un empleado de la compañía dijo que "todos los pasajeros pasarán la noche en un hotel".

Sin embargo, José Luis Iglesias, empresario asturiano y uno de los pasajeros encerrados, manifestó a las 01.40 de esta madrugada, mediante un teléfono móvil, que no pensaban abandonar la aeronave. "Llevan horas mareándonos. No hay piloto para en el avión. Ahora quieren que nos bajemos. Se ha presentado un persona de Spanair con malos modos pidiéndonos que nos vayamos, pero no queremos porque no hay hoteles libres en toda la ciudad. Nunca había sufrido un trato semejante", señaló.

Horas antes, los usuarios de Barajas se mostraban resignados e indignados por el retraso general de los vuelos. Marcos Neves, un portugués de 21 años, que trabaja en Ford, regresaba ayer de Valencia tras resolver un problema técnico en la factoría que esa firma de automóviles tiene en Almusafes. Pero en Barajas se encontró con el retraso de su vuelo. Según su tarjeta de embarque, tenía que haber aterrizado en Lisboa a las 16.20, señala indignado ayer a las 23.20. "Esto es un desastre. No hay quien aguante esta espera tras un día de tensión en el trabajo", se quejó.

Elena Martín, de 21 años, esperaba a su padre que regresaba de su viaje a La Coruña. "Esta mañana [por la de ayer] ya salió el vuelo con una hora de retraso Y ahora lleva otro tanto de demora para volver. Si lo llego a saber, no le espero y le digo que se coja un taxi", lamentaba.

Retraso radiactivo

Según los portavoces del aeropuerto, las causas de los retrasos se deben a rotaciones en las tripulaciones, averías en las aeronaves y a restricciones en los sectores aéreos. Sin embargo, el vuelo IB3166 rompió las estadísticas. Ni las famosas causas operativas, ni las causas técnicas retrasaron este vuelo con destino a Londres. Fueron unas inesperadas causas radiactivas las que llevaron a este avión a despegar con dos horas y 23 minutos de retraso. Según reconoció la compañía Iberia, un grupo de diez pasajeros se negó a montarse en el avión cuando se enteró de que la aeronave portaba material radiactivo en sus bodegas.

El relato de la compañía es el siguiente: "No se avisó al comandante del avión con tiempo suficiente que el aparato llevaba material radiactivo. Por eso, un operario tuvo que acercarse [a pie de avión] a decírselo. Como se lo comunicó cerca de donde estaban los pasajeros, algunos de se enteraron y se lo dijeron a los demás. Diez se negaron a subir, y de ahí el retraso". Finalmente, nueve aceptaron subir y el avión partió a Londres casi dos horas y media tarde.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_