Becerril defiende el papel de los vecinos como eje de su proyecto sobre Sevilla
La alcaldesa inicia la campaña electoral
"La ciudad no puede hacerse contra nadie". Esta idea fue el eje del Manifiesto por Sevilla que presentó ayer la alcaldesa y candidata a la reelección por el PP, Soledad Becerril, ante representantes de varios colectivos y asociaciones. Becerril, que enunciará su programa electoral más adelante, se centró en el proyecto "ambicioso y completo" de lo que opina que debe llegar a ser Sevilla, y dijo: "Cada día es más evidente que son los propios vecinos los que tienen que decidir dónde quieren que se haga el aparcamiento o dónde debe estar la parada de autobús".
El Manifiesto por Sevilla, que Becerril dio a conocer en el Convento Santa María de los Reyes, es el pistoletazo se salida de la campaña de la alcaldesa para la ciudad. Aunque el acto lo abrió la secretaria general de Asuntos Sociales y presidenta del PP sevillano, Amalia Gómez, la presentación corrió a cargo del profesor Jaime García Añoveros, quien recordó los tiempos que compartió con la alcaldesa cartera en el consejo de ministros de los gobiernos de la UCD y destacó la "pasión por hacer cosas" de la candidata. Soledad Becerril avisó en el comienzo de su alocución que una ciudad no termina de hacerse nunca porque "es una obra humana en constante evolución", que debe avanzar en un determinado sentido "pero no puede hacerse contra nadie". En ese sentido, añadió: "La ciudad es, por encima de todo, convivencia, pero tiene que ser también progreso". Durante el manifiesto sobre el modelo de la Sevilla del siglo XXI, en el que destacan la creación de empleo, la educación, el turismo, un nuevo PGOU (Plan General de Ordenación Urbana) y las zonas verdes, la candidata insistió en la participación de sus habitantes. "Los vecinos deben participar en las grandes y en las pequeñas decisiones, por eso los consejos sectoriales y los órganos con participación vecinal deben tener mayor presencia y peso en las decisiones", dijo Becerril, para quien es necesario que todas las áreas de acción municipal cuenten con su propio órgano y someter a consulta de las juntas de distrito la mayoría de las decisiones. En cuanto al empleo, señaló que es objetivo prioritario de su proyecto. Sevilla tiene un presupuesto de 113.000 millones de pesetas, "está seguramente entre las empresas más importantes de Andalucía y el empleo que genera directa e indirectamente es enorme". Destacó las posibilidades de sectores industriales como el aeronáutico, la construcción naval y el automóvil, y el potencial del parque tecnológico de La Cartuja, cuya adquisición de suelo es necesario facilitar. Turismo Becerril añadió que la industria sevillana aporta el 14,10% del PIB, aunque matizó que la mayor parte de las aportaciones sevillanas ( 71,8%) procede del sector servicios, por lo que recalcó el cuidado de las infraestructuras turísticas de la ciudad y el cuidado de su patrimonio y servicios de calidad. La alcaldesa afirmó conceder "la máxima importancia" a las decisiones urbanísticas que promuevan un crecimiento pensado, planeado y concebido en el nuevo PGOU, que debe tener en cuenta el desarrollo de los sectores económicos, sin rellenar todo el territorio, respetar los espacios verdes y dotar de infraestructura a los barrios. En este punto, opinó que es "urgente" recepcionar los que, aunque construidos hace 50 o 60 años, siguen con un mantenimiento privado. También dedicó un espacio a la cultura, el transporte y el metro y las finanzas del Ayuntamiento con la reducción del déficit.
Nuevas normas para evitar el abandono de edificios
Soledad Becerril pasó de puntillas sobre envejecimiento del casco histórico de Sevilla y el reciente derrumbe de un muro en la calle Bustos Tavera que aplastó a una joven de 25 años. Aunque mencionó el suceso y abogó por revisar las ordenanzas para garantizar la seguridad de los vecinos, no se detuvo en más detalles. Manifestó que el centro histórico constituye un gran legado patrimonial que identifica a toda Sevilla, el cual no sólo hay que conservar sino utilizar plenamente y transmitir a las nuevas generaciones. La alcaldesa defendió la creación de una agencia de rehabilitación del centro histórico para programar en dos cuatrienios un plan de rehabilitación en el que participen propietarios, promotores y entidades financieras. Soledad Becerril denunció, no obstante, los escasos y lentos mecanismo legales de los que dispone un ayuntamiento para evitar que manzanas enteras de edificios permanezcan "décadas y décadas vacíos" en zonas de especial protección, como por ejemplo, el entorno de la catedral. La alcaldesa no entró en ninguna polémica y se limitó a decir que hay que ser más exigentes con los propietarios de estos edificios abandonados, de manera que el centro histórico sea compatible con la seguridad.
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