Borrell está dispuesto a estudiar un nuevo foro que supere la Mesa de Ajuria Enea

El líder del PSOE, José Borrell, cree que la negativa del lehendakari, Juan José Ibarretxe, a convocar la Mesa de Ajuria Enea la convierte en un foro "muerto", por lo que "siendo realista y no inmovilista", está dispuesto a "explorar todas las vías pacíficas" para terminar con la violencia en el País Vasco, incluyendo un nuevo foro que supere la Mesa de Ajuria Enea. Sin embargo, los socialistas vascos ven como única solución exigir al lehendakari que la convoque. El Gobierno mantiene esta misma tesis, porque cree que este foro "sigue siendo un buen ámbito de consenso".

Ibarretxe afirmó el martes que tanto Ajuria Enea como Lizarra están "superados", por lo que habría que crear una nueva mesa en la que participen todos los partidos. Borrell defiende que en este tema "no se puede ser inmovilista" y hay que estar abierto a nuevas opciones.Para el candidato del PSOE, es inútil seguir exigiendo a Ibarretxe que convoque el Pacto de Ajuria Enea, porque "es evidente" que no está dispuesto a hacerlo. Por ello cree que hay que estar abiertos a todas las vías pacíficas para solucionar el conflicto, incluyendo la de convocar un nuevo foro, pero siempre "sin exclusiones y partiendo del rechazo de la violencia por parte de todos los asistentes".

Lo que sí puede hacerse, según Borrell, es exigir al Gobierno que convoque el Pacto de Madrid, que une a todas las fuerzas democráticas con representación en el Congreso de los Diputados. Los socialistas llevan tiempo solicitando esa cita y si el Ejecutivo sigue negándose como hasta ahora, presentarán una interpelación en el Parlamento para que se debata el proceso de paz en un pleno extraordinario. No se puede permitir, según Borrell, que la Cámara llegue al debate del estado de la Nación sin que antes haya analizado el proceso de paz.

Sin embargo, Rosa Díez, portavoz adjunta del PSE-EE, no acepta la propuesta del lehendakari, que sólo sirve "para demostrar que no tiene ninguna capacidad de maniobra", por la presión de HB. A partir de ahí, y siempre que HB condenara todo tipo de actos violentos, se podría pensar en incluir a esta fuerza en esa Mesa.

Pero lo más grave no es, según Díez, que Ibarretxe no tenga capacidad de maniobra, sino que compare Ajuria Enea con Lizarra ya que este último no es ningún foro para la paz, sino un "proyecto exclusivo de los nacionalistas para repartirse el poder".

El Gobierno también está en contra de los planteamientos de Ibarretxe. El portavoz, Josep Piqué, afirmó ayer que, para el Ejecutivo, Ajuria Enea "sigue siendo un buen ámbito de consenso entre todos". También criticó la comparación entre ambos foros, porque mientras en uno están "todos los partidos democráticos", en Lizarra está representada "sólo una parte de la sociedad vasca".

Javier Arenas, secretario general del PP, afirmó ayer en Irún que la propuesta del lehendakari no puede siquiera analizarse porque no lo permite el panorama político vasco, marcado por el mantenimiento del "terrorismo callejero" y la ausencia de una tregua definitiva de ETA. Sólo el líder de IU en el País Vasco, Javier Madrazo, apoya sin fisuras el análisis de Ibarretxe en cuanto al proceso de paz. Madrazo pidió ayer al PP y al PSOE que sean "sensatos" y participen en ese tercer foro.

Por su parte, los partidos y sindicatos nacionalistas e IU, firmantes de Lizarra, ofrecieron ayer una rueda de prensa para pedir a la ciudadanía que secunde las movilizaciones convocadas -una manifestación en Bilbao el sábado y un paro de una hora el lunes- para agilizar el proceso de paz, informa El Gobierno vasco secundará el paro pero sólo durante cinco minutos.