Estancados los acuerdos para las listas municipales entre PDNI y PSOE

El Partido Democrático de la Nueva Izquierda, PDNI, no podrá concurrir, tay como exige su directiva regional, a las elecciones municipales en Madrid, el próximo 13 de junio, bajo la denominación PSOE-Progresistas. Éste es el criterio de los negociadores socialistas, que argumentan ante la otra parte que los acuerdos federales del PSOE y PDNI, a escala estatal, lo impiden en este ámbito, si bien lo autorizan para las elecciones europeas y autonómicas. La negociación prosigue.

La Federación Socialista Madrileña y el Partido Democrático de la Nueva Izquierda se encuentran enfrascados estos días en un problema que mantiene estancado un importante aspecto de sus negociaciones sobre las listas conjuntas que van a presentar a la alcaldía de Madrid: la cuestión de la denominación de las candidaturas.El PSOE se atiene a un acuerdo federal, del pasado 8 de marzo, según el cual a las elecciones municipales a escala estatal "concurrirán el PSOE y el PDNI en candidaturas conjuntas, sin coalición electoral". De cumplirse esta cláusula, se imposibilitaría la agregación del término Progresistas a la denominación conjunta.

La Comisión Directiva de Nueva Izquierda de Madrid, por su parte, acordó mayoritariamente exigir que tal denominación "ha de mantenerse en las listas a los ayuntamientos madrileños para garantizar la pluralidad de la candidatura y la identidad propia, como formación política independiente", según sus dirigentes.

Dos delegaciones, de cinco miembros cada una, encabezadas por Jaime Lissavetzky, secretario general de los socialistas madrileños, por parte socialista y por la otra, Isabel Vilallonga, presidenta de Nueva Izquierda de Madrid, respectivamente, han consumido ya tres reuniones sin llegar a un acuerdo sobre ese extremo.

Para Jaime Lissavetzky, el impedimento de aplicar la denominación PSOE-Progresistas en el ámbito municipal madrileño "quedó contemplada ya en un acuerdo a escala federal de ambas formaciones suscrito entre Joaquín Almunia y Diego López Garrido, hace un mes. "Por consiguiente, no es un asunto movible (negociable) para Madrid. Hay dificultades legales y las direcciones regionales tienen poco que decir al respecto".

Isabel Villallonga, líder madrileña de NI, dice por su parte: "No tendría sentido integrarnos en una lista denominada PSOE a secas. No sería realista, ni razonable, ni innovador. Hacerlo contribuiría a eliminar la pluralidad de la candidatura y nuestra diferencialidad. Hay que seguir negociando", añade.

Argumentos legales

"No valen argumentos legales, sino políticos. Si en otros sitios se ha modificado ese acuerdo, seguro que en Madrid pueden hacerlo también". Lissavetzky no tiene constancia de que tal acuerdo haya sido cambiado en otras zonas.Enrique Echegoyen, miembro de la comisión negociadora socialista, abunda en la posición enunciada por Lissavetzky y afirma que la distinción nominal propugnada por Nueva Izquierda quedará asegurada en todo caso en los grupos municipales constituidos posteriormente a los comicios del 13 de junio. Pero esta garantía no satisface las principales demandas de los negociadores de NI de Madrid.

Así, Consuelo Toledo, negociadora por Nueva Izquierda, dice: "Las reticencias dentro del PSOE madrileño para admitir la denominación conjunta que proponemos obedecen a que desde algunos medios socialistas no se ven los réditos electorales que tal distinción les procurará".

Nueva Izquierda cree aportar a esta unión electoral, según fuentes de su directiva, un caudal de votos considerable procedente de medios de la izquierda madrileña y entiende que estos sectores se autoidentifican bajo la denominación de progresistas, que propone.

El asunto ha de quedar resuelto el 10 de abril, fecha en la cual la Comisión Federal del PSOE culminará las listas.