_
_
_
_

La propuesta del PSOE de elecciones en junio toma cuerpo y mete presión al resto de los partidos. El PA piensa ya en Ortega

Lourdes Lucio

Tomar la iniciativa y presionar. La propuesta del secretario de Organización del PSOE andaluz, Luis Pizarro, de adelantar las elecciones autonómicas al 13 de junio, junto con las municipales y las europeas, logró ayer esos dos objetivos, además de causar un evidente desconcierto en todos los partidos, en los que se ha originado una auténtica guerra psicológica. Frente a las múltiples conjeturas y opiniones de los dirigentes políticos, el presidente de la Junta, quien tiene la facultad de decidir la fecha, guardó silencio. Manuel Chaves escuchó ayer las razones de su partido a favor de convocar los comicios en junio.

Como todos los jueves que hay pleno del Parlamento, Chaves celebró ayer un almuerzo con algunos miembros del comité de coordinación entre el PSOE y el Gobierno. Se habló de los pros y los contras del adelanto de las elecciones andaluzas -previstas, en principio, para la primavera del año 2000-, y al día de ayer, los argumentos que apoyan el anticipo sumaban más puntos que las objeciones, aunque ningún socialista admite haber escuchado del jefe del Gobierno andaluz una opinión. "El presidente es el que tiene la última palabra", repetían una y otra vez. A favor de los comicios en junio está la presumible mayor participación electoral, circunstancia -aseguran los socialistas- que beneficia al PSOE, aun cuando la movilización más importante se produce con las generales. También hay que tener en cuenta la cobertura de la que dispondrán los candidatos a los ayuntamientos bajo el paraguas de Chaves, así como el de los consejeros y líderes provinciales que encabecen las listas autonómicas. Este análisis está sustentado en las múltiples encuestas que maneja el Partido Socialista y otras tantas que están en marcha, si bien, como reconocen expertos electorales, no hay ningún estudio demoscópico que garantice el éxito de una decisión que entraña un considerable riesgo. En contra del anticipo pesa la difícil argumentación de la convocatoria. El propio Pizarro justificaba en sus declaraciones la fecha de junio por razones "estrictamente partidarias," y reconocía que esta opción puede entrar "en contradicción" con el interés general esgrimido por Manuel Chaves. También hay dudas acerca de si en un enfrentamiento en distintas urnas entre alcaldes del PP y Manuel Chaves, tirarían más los primeros que el segundo. La pregunta que circulaba ayer por el PSOE era: "¿Quién contamina más a quién? ¿Chaves a los alcaldes, o los alcaldes a Chaves?". Esta reflexión tiene también reflejo en las encuestas socialistas, que indican que la marca PSOE es muy fuerte, pero no tanto sus candidatos en las ocho capitales. Otro dato a considerar es que si se celebran las elecciones en junio se harían a la par que las autonomías del artículo 143, con menor techo competencial. Las declaraciones del secretario de Organización, Luis Pizarro, a El País Andalucía proponiendo el adelanto, consiguieron varios objetivos: que el PSOE tome, una vez más, la iniciativa política, de modo que todo gire en torno a su propuesta; meter una presión brutal al resto de las formaciones, básicamente al Partido Popular, que tendría que improvisar un candidato; acallar al PA, que asegura que Chaves convocará elecciones en otoño; y conformar una opinión mayoritaria en el propio PSOE a favor de las elecciones en junio, cuando la mayoría pensaba más en otoño y en primavera del 2000. Partidario de junio es el portavoz parlamentario, José Caballos, según afirmó ayer en el Parlamento. En lo que respecta a IU, ésta ha sido, con diferencia, la organización que ha acogido con más tibieza el envite del adelanto, y sus dirigentes han pasado de puntillas sobre el momento político en el que la hipótesis de la convocatoria coge a sus cuadros. Ni frío ni calor. Dentro de IU Andalucía hace tiempo que se mueven pocas cosas. Está claro, aunque no sea oficial, que el coordinador regional, Antonio Romero será el candidato a la Junta, y que el que lo fuera en las elecciones de 1994 y 1996, Luis Carlos Rejón, tiene la vista puesta en el Congreso. Felipe Alcaraz acaba de resultar reelegido por séptima vez -llegará a cumplir 22 años en el cargo- secretario regional del PCA. En cuanto a la Cámara andaluza, la mitad del grupo parlamentario estaba ya prácticamente en campaña porque concurren en municipales y autonómicas. Rejón dijo ayer que a IU no le preocupa el adelanto porque existe "paz interna", tranquilidad que algunos dirigentes definen como "desgana".Los andalucistas no quieren mover pieza hasta ver qué es lo que hace Manuel Chaves. De momento, se han limitado a reiterar su discurso de que las elecciones andaluzas deben celebrarse en solitario, sin otra convocatoria que distraiga el debate. Pero aunque a efectos formales no hay toque de diana, las cábalas sobre los distintos escenarios se han disparado, sacando a la luz disensiones que nunca se hubieran difundido si el PSOE no lanza el posible adelanto a junio. El candidato oficioso, Pedro Pacheco, se mostró ayer dispuesto a simultanear su campaña a la alcaldía de Jerez con la de la Junta, una declaración puramente de urgencia porque sabe que es imposible compatibilizar una batida por Andalucía con su necesaria presencia en Jerez para renovar mandato. Mientras unos postulan en su lugar al consejero de Turismo, José Núñez, otro sector descarta su nominación, ya que no cuenta con suficiente apoyo en el partido. "Es un buen consejero, pero un simple vocal; si Pedro no puede, sin duda el candidato seguro es Antonio Ortega, que es el secretario general y la cara actual del PA", aseguró sin titubeos un dirigente andalucista.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_