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Las asociaciones vallecanas declaran persona no grata al consejero Cortés

Las asociaciones de vecinos de Puente y Villa de Vallecas han declarado persona no grata al consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes, Luis Eduardo Cortés, que les llamó "racistas" y "xenófobos" por sus críticas al "excesivo" número de realojamientos de chabolistas que el Gobierno regional realiza en el distrito. Los vecinos amenazan con protestas cuando acuda a la zona a inaugurar las nuevas estaciones de metro entre Miguel Hernández y Congosto y tienen previsto además demandarle por "injurias".

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Las declaraciones de Cortés han sentado fatal a las asociaciones de vecinos vallecanas, ya que consideran que en pocos distritos de la ciudad conviven tantos payos, gitanos e inmigrantes. Los grupos parlamentarios de IU y PSOE en la Asamblea de Madrid también han solicitado a Cortés que se retracte.La caja de los truenos se desató cuando hace una semana las asociaciones ciudadanas presentaron al Gallo vallecano, una mascota que seguirá al presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, en todos los actos públicos en protesta por "los incumplimientos del Gobierno regional con la zona".

Estas entidades se quejan de que el mandatario autonómico haya decidido retrasar hasta la próxima legislatura la puesta en marcha de un plan de inversiones en el distrito, similar al aplicado en Villaverde. En dicho plan, los vecinos solicitaban al Gobierno que desmantele los poblados marginales de La Celsa y La Rosilla y que frene el ritmo de realojamiento de chabolistas, que creen "excesivo".

Las cifras parecen dar la razón a las acusaciones de desequilibrio formuladas por estas entidades. En Puente de Vallecas han sido realojadas desde 1995 un total de 137 familias chabolistas, la mayoría gitanas, tanto en pisos públicos como en viviendas privadas adquiridas por la Comunidad y arrendadas a precio de alquiler social. Sólo Carabanchel se acerca a esa cantidad con 92 realojamientos, muy lejos de distritos como Arganzuela, Chamartín, Chamberí, Retiro, Salamanca o Tetuán donde no se ha realizado ninguno, y de otros como Ciudad Lineal, que ha acogido a 14 familias.

Cortés justifica esas diferencias con el argumento de que en Carabanchel o Vallecas se pueden adquirir pisos más baratos para alojar a los chabolistas. "137 familias es una pequeñísima proporción en un distrito donde viven 68.000", afirma.

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Pero las asociaciones replican que Vallecas es un distrito con suficientes problemas de paro, fracaso escolar y marginación como para asumir tantos realojamientos. "Sobre todo porque no van acompañados de suficientes medidas de apoyo social", afirman. Creen, además, que la Comunidad tiene medios para adquirir suelo y hacer pisos sociales en otros distritos en lugar de concentrarlos en la periferia sur.

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