Las cadenas españolas se lanzan a la producción de documentales dramatizados
Un nuevo formato televisivo, el documental dramatizado o novelado (híbrido entre el documental convencional y la serie de ficción) se aproxima con fuerza a las pantallas españolas. TV-3 y Tele5 han llevado a cabo ya los primeros experimentos, pero la verdadera avalancha llegará en primavera. Televisión Española y Antena 3 están volcadas en el diseño de varios productos de este tipo, documentales protagonizados por gente corriente cuya vida cotidiana se transforma en un serial para la pequeña pantalla. Vidas paralelas es el título de la nueva producción de TVE, que dirige Antonio Esteve.
Los documentales dramatizados en forma de serie (docu-soap en terminología anglosajona) han conseguido un abrumador éxito en Estados Unidos y Australia. Ahora se extienden por Europa. En el panorama español ha habido un programa de cobertura nacional que se aproximaba al nuevo formato televisivo: Vivir cada día, aquel espacio de los años sesenta dirigido por José Luis Rodríguez Puértolas, que retrataba ante la cámara asuntos de la vida cotidiana narrados por sus protagonistas.TVE está embarcada ahora en Vidas paralelas, una producción de 13 capítulos en los que se intenta reflejar las peripecias vitales de personas normales en las que el público pueda verse reflejado. Los directivos de la cadena recalcan que el nuevo formato televisivo "está alejado del reality show".
Con la colaboración de productoras privadas, Antena 3 está desarrollando también varias líneas en esta dirección. "Se trata de documentales con gente real, que cuentan las cosas que verdaderamente les ocurren. Todo ello narrado con una estructura similar a la de la ficción: con su trama y su intriga", precisa un directivo de Antena 3. Según las previsiones, estos productos estarían listos para su estreno en abril o mayo.
Su formato es más corto que el de una obra de ficción convencional. Tienen una duración aproximada de 30 minutos por capítulo, aunque por su propia técnica es necesario producir un abultado número de horas. La relación viene a ser 60-1. Es decir, para conseguir una hora de emisión se necesita grabar alrededor de 60 horas. Además de ser producciones muy largas, carecen de guión. Pero no por ello se amortiza el puesto del guionista. Éste tiene la función de seguir el desarrollo de las tramas, enfatizar las actividades de nuevos personajes o elegir las historias que se irán entrecruzando con la columna vertebral del relato. Los expertos insisten en que lo fundamental para que un docu-serie funcione es "hacer un buen casting".
TV-3 estrenó el 18 de enero su primera producción. Se titula Bellvitge hospital, está compuesta por 13 capítulos y muestra cómo es la vida de un centro sanitario público. Los ideólogos son dos experimentados reporteros, Joan Úbeda y Francesc Escribano, que abordan "con sensibilidad" un asunto tan espinoso como es la enfermedad. Se emite los lunes en horario de máxima audiencia y cada episodio dura 30 minutos, con un espectacular éxito (30% de cuota el pasado lunes). Los protagonistas no son actores, sino personajes reales: médicos del hospital de Bellvitge y enfermos de verdad. En todos los casos las personas que aparecen en la serie han autorizado por escrito su intervención en el programa. Algunas historias se desarrollan y acaban en una misma entrega, pero hay otras que duran más de un capítulo. En uno de los primeros, una mujer era informada ante las cámaras por su médico de que padecía un cáncer de mama.
El equipo de Bellvitge hospital rodó 170 horas en el centro. El hecho de convivir con el personal y los pacientes durante horas y horas facilitó mucho el trabajo. "Pasábamos tanto tiempo con ellos que al final se olvidaban de las cámaras", dice Escribano.
Con motivo del último duelo Barça-Real Madrid, Tele 5 emitió un documental "novelado". En los días previos del partido de ida, las cámaras siguieron minuto a minuto a un periodista radiofónico, a una pareja de barrenderos encargada de limpiar el Bernabéu y a un grupo de policías desplazados a Madrid para velar por la seguridad del estadio. La fórmula de Tele 5 no prevé dramatizaciones con formato de serie sino de reportaje.
