Vaivén ultima la producción de una comedia de enredo familiar

Vaivén Producciones ultima los detalles del que va a ser su segundo montaje, Crímenes del corazón, una pieza de teatro ácida sobre relaciones familiares, que se estrenará a primeros del próximo mayo en Elorrio y pasará probablemente por la Feria de Teatro de San Sebastián. La obra, dirigida por Maribel Belastegui, ha sido adaptada por el equipo a partir del texto del mismo nombre por el que su autora, la escritora norteamericana Beth Henley, recibió un premio Pulitzer. Sobre el escenario, cinco intérpretes -Alberto Arizaga, Ana Pimenta, Olatz Beobide, Iñake Irastorza y Nati Ortiz de Zarate-, curtidos en teatro, televisión y cine, dan vida a los protagonistas de una historia eminentemente universal en los temas y ácida en su lenguaje. El argumento se presta a ello. Ani, la menor de tres hermanas de edad madura, harta de recibir palizas de su marido, un senador corrupto, decide pegarle un tiro que le hiere. Este suceso vuelve a reunir a las hermanas en el domicilio familiar. Del encuentro de las tres surgen los fantasmas del pasado, los viejos rencores, los gratos recuerdos y los muchos desacuerdos. Todo, mientras perfilan una estrategia para librar a Ani de la cárcel. Como telón de fondo, se van entretejiendo cuestiones de actualidad. Ése fue precisamente uno de los motivos que llevó a Vaivén a realizar la adaptación de Crímenes del corazón. "Lo que nos interesó es que trata temas universales. Es una obra que, desde la clave del humor, está hablando de los malos tratos a la mujer, del racismo y la xenofobia, de la hipocresía y de la corrupción política", afirma Iñaki Salvador, pianista de jazz, e impulsor de esta empresa junto con la actriz Ana Pimenta. Trabajo en equipo La traducción del texto teatral escrito por Henley fue todo un proceso de trabajo en equipo. Luego llegó la tarea de adaptación, para trasladar la acción, planteada en Estados Unidos, a los usos y costumbres de un pueblito de Valladolid. Ahora queda pendiente la música de apoyo, cuya composición correrá a cargo del propio Salvador. La obra, de una hora y 25 minutos de duración, optó a las ayudas del Gobierno vasco al teatro, pero no logró ninguna subvención. Fue entonces cuando se "volvió a replantear todo el espectáculo, a analizar nuevamente su viabilidad". Al final salió adelante y esto hay que agradecérselo, según Salvador, "al equipo humano de Crímenes del corazón". Desde el diseñador de luces hasta el escenógrafo y los actores, todos han renunciado a cobrar el periodo de ensayos. Y la recaudación de las primeras cuatro funciones se destinará a cubrir los gastos de producción. Crímenes del corazón supone un salto cualitativo en la corta trayectoria de Vaivén que se inició en 1998 con el espectáculo La Coraje. La apuesta es ahora más "ambiciosa" en cuanto a producción, asegura Salvador.