Un testigo declara que vio a un solo hombre perseguir al camionero

Las armas y objetos contundentes encontrados en el lugar de los hechos y los resultados de la autopsia indican que Antonio Civantos, el camionero brutalmente apaleado en Natzaret, fue agredido por varios personas. Ahora bien, ninguno de los testigos que han comparecido ante el titular del Juzgado de Instrucción número 15 de Valencia, Vicente Ríos, encargado de investigar el crimen, vieron a más de una persona atacando a Civantos. Ayer, un vecino del barrio aseguró que vio, desde una distancia apróximada de unos 50 metros, cómo una sola persona perseguía al camionero, le alcanzaba y se enzarzaba con él en una pelea. No observó nada más, y tal como hiciera el viernes otro de los testigos del caso, no tenía una explicación que justificara su pasividad -no intervino en la refriega- o un argumento que clarifique la discontinuidad en su relato de los hechos: no contempló todas las secuencias de la agresión aunque si vio, posteriormente, el cadáver de Civantos. El testigo, según aseguraron ayer los tres abogados presentes en el interrogatorio, no pudo concretar quién persiguió a Civantos, ni siquiera si el agresor portaba algún arma. José M., el padre del niño de dos años mortalmente atropellado por el camionero, es la única persona que ha aceptado su participación en el linchamiento del transportista.