Los jóvenes vascos no son libres para disfrutar de su tiempo de ocio, según un estudio sobre conductas juveniles

Los jóvenes no gestionan su tiempo libre de forma soberana. Están coartados por su dependencia de la institución familiar y por las dificultades que encuentran para alcanzar su independencia económica. Los comportamientos de la juventud durante sus horas de ocio ha sido motivo de un estudio coordinado entre la Universidad del País Vasco, la Oficina del Plan Joven de la Diputación de Barcelona y el departamento de Juventud y Deporte de la Diputación de Guipúzcoa. Un total de siete ponencias han dado como resultado la publicación del libro Las nuevas pautas de ocio de los jóvenes. Una de las conclusiones del informe advierte del aumento del tiempo libre en edad juvenil, aunque también se constata que los jóvenes vascos "no son libres para disfrutar del tiempo libre" debido a que "las condiciones económicas y sociales atan y sujetan al joven a la familia". Esta tesis, defendida por el profesor de la UPV José Ignacio Ruiz Olabuenaga, se sostiene con la consideración de que hoy los jóvenes son unos "libertos". El uso y disfrute del tiempo libre en la juventud exige una intervención pública "reequilibradora", ajustada a las nuevas pautas de ocio de los jóvenes de hoy, explicó Patxi Agiriano, jefe del servicio de juventud de la Diputación guipuzcoana. La población juvenil demanda que la actuación de las instituciones vaya en consonancia con los hábitos actuales. Patxi Agiriano puso como ejemplo de la actuación pública las iniciativas que se están poniendo en práctica en Barcelona y en Gijón, donde han decidido mantener abiertos algunos polideportivos y bibliotecas durante las 24 horas del día. "Estos programas", subrayó Agiriano, "están adaptados a las costumbres y horarios de los jóvenes, cuyo tiempo libre comienza cuando cierran estos lugares. A lo mejor resulta que a partir de las 10 de la noche las casas de cultura y las piscinas atraerían a más jóvenes que los bares y las discotecas". Según Patxi Agiriano, iniciativas de este tipo, tendentes a la diversificación de la oferta de ocio para los jóvenes, deberían impulsarse también en el País Vasco para comprobar la reacción de este colectivo social. Del estudio presentado ayer se desprende también que la generación actual de jóvenes presenta un cuadro de hábitos heterogéneo, aunque de sus comportamientos se aprecia que durante la semana dedican casi todo su tiempo al estudio y la televisión, mientras que el fin de semana lo emplean "tomando copas, vinos o aperitivos y viendo la televisión". También hay una proporción de jóvenes cuya actividad preferida consiste en "no hacer nada".