IU y PSOE comienzan su aproximación destacando coincidencias en política municipal

La reunión entre el PSOE e IU que tuvo lugar ayer en la sede de la coalición sirvió para normalizar las relaciones entre ambas fuerzas. Así lo reconocieron los responsables de política municipal de ambas formaciones, después de este primer encuentro para intercambiar impresiones sobre las propuestas de ambos partidos en este ámbito. Según el representante socialista, Alfonso Perales, "las coincidencias son mayores que las divergencias", aunque señaló entre estas últimas algunas de gran calado, como la relativa al sistema de elección de alcaldes.

Tanto el PSOE como IU descartan cualquier tipo de pacto preelectoral para presentar listas conjuntas. Donde coinciden es en la intención de evitar que se repita la situación de 1995, cuando grandes capitales como Málaga y Córdoba y otras muchas ciudades más pequeñas quedaron gobernadas en minoría por el Partido Popular por la falta de acuerdo de las formaciones de izquierda. El primer paso lo dieron ayer, al reunirse los responsables de política municipal de ambos partidos, Francisco Herrera (IU), y Alfonso Perales (PSOE). Tras esta entrevista, en la que se limitaron a intercambiar los borradores de sus programas electorales, Perales destacó que en el PSOE existe una convicción "más fuerte que nunca" de que el electorado les exige que lleguen a acuerdos con IU para no repetir la situación de 1995, que este dirigente considera "un error", y como tal lo reconocen ambas fuerzas. Perales aseguró que las convergencias en política local son mucho mayores que las divergencias. El análisis que se hace en este partido es que el PP ha conseguido agrupar a todas las fuerzas de la derecha, y para tratar de contrarrestar esa unión hay que agrupar de alguna manera a la izquierda.

Máximo acercamiento

Lo que pretenden IU y el PSOE es llegar a los comicios municipales de junio del 99 con el acercamiento máximo posible entre sus programas electorales, para movilizar al electorado de izquierdas difundiendo la idea de que es muy posible -aunque nadie quiere comprometerse todavía- que se logren acuerdos poselectorales en diversas ciudades.La portavoz de IU en el Congreso de los Diputados, Rosa Aguilar, fue ayer más lejos al anunciar que espera que los contactos iniciados ayer sean "fructíferos" y ampliables al ámbito autonómico y estatal. Aguilar no espera que se alcance ningún pacto, pero sí que "se constate efectivamente la posibilidad de que, una vez llegado el momento, se realizará".

Uno de los temas donde parece haber mayor entendimiento es en la participación ciudadana en la gestión de los ayuntamientos. De hecho, en la próxima reunión entre ambas fuerzas, aún sin fecha, se dará entrada a la Confederación de Asociaciones de Vecinos de España. Se estudiará entonces el documento de esta organización, llamado Carta Ciudadana, en el que se desarrolla este asunto. IU va más allá y propone cambiar la ley para que una petición de referéndum firmada por un cierto porcentaje de ciudadanos obligue al alcalde a convocarlo. También propone el desarrollo de un mecanismo de cogestión de los equipamientos sociales entre vecinos e instituciones, explicó Herrera.

Otro tema donde ambas fuerzas políticas encuentran coincidencias es el del mal funcionamiento de las diputaciones provinciales. Desde el PSOE se acusa al PP de haber convertido aquéllas donde gobierna en un reducto del "caciquismo local", donde "se está colocando a clientes, familiares y amigos del PP", según Perales.

Una de las mayores divergencias se encuentra en el poder de los alcaldes y sus equipos de gobierno: mientras el PSOE propone aumentarlo, IU no quiere restar capacidad de decisión a las corporaciones municipales.

Pero lo que de verdad suscita una discrepancia grave entre ambas formaciones es la proposición de ley que el PSOE ha presentado en el Congreso de los Diputados en la que propone la elección directa de los regidores una medida que "ya ha sido aprobada en varios países europeos, como Italia", según explicó Perales. Herrera calificó esta medida de "anticonstitucional", ya que acabaría con el sistema proporcional de elección que propugna la Carta Magna. En todo caso, ambos dirigentes destacaron que éste no será un "obstáculo insalvable".