PNV, EA y EH estudian formar una coalición electoral en Navarra

Las formaciones nacionalistas vascas -PNV, EA y EH- estudian acudir en listas conjuntas a las elecciones municipales de junio en algunas localidades de Navarra. Esta alianza electoral, aún en fase incipiente, concurrirá sólo en "casos excepcionales", según admitió ayer el presidente de Eusko Alkartasuna, Carlos Garaikoetxea. La iniciativa, paralela a la celebración de la reunión de la Asamblea de Municipios, es el reflejo de los contactos que estas tres formaciones están manteniendo para lograr un pacto de estabilidad del Gobierno vasco.

Las conversaciones entre los tres partidos nacionalistas están todavía en fase preliminar, puesto que la futura coalición electoral entre ellas se reduce a un deseo confesado ayer en Zarautz (Guipúzcoa) por el presidente de Eusko Alkartasuna, Carlos Garaikoetxea. Éste matizó que las listas conjuntas cristalizarán sólo en "casos [municipios] excepcionales".Esta maniobra está gestándose de forma sincronizada con la estrategia electoral que preparan PNV y EA en el País Vasco. Garaikoetxea reconoció que estos dos partidos irán juntos a los comicios municipales de junio en aquellas localidades vascas donde "las opciones nacionalistas pueden peligrar".

Las futuras alianzas se preparan en el marco de la inminente celebración de la Asamblea de Representantes Municipales de Euskal Herria, prevista para el próximo día 6 en Pamplona. En la capital navarra se reunieron ayer más de 500 cargos electos de HB que defendieron la asamblea como "el primer organismo nacional vasco" de carácter municipal.

HB concentró en Berriozar (Navarra) a sus electos municipales para debatir la sesión constitutiva de la asamblea y al término de la reunión aprobaron la creación de "sujetos nacionales para actuar como pueblo". En el texto repartido a la prensa, la denominación original de Asamblea de Municipios de Euskal Herria aparece corregida a mano por la expresión "de representantes municipales".

Insatisfacción

La coalición, que en ningún momento de su pronunciamiento aludió a las competencias que pueda tener la asamblea de municipios o a la forma jurídica que tomará, afirma que trabajará en su seno para consolidar "el primer organismo nacional vasco que tiene el carácter nacional", si bien más adelante HB muestra una aparente insatisfacción con las características con las que se alumbrará esa iniciativa: "Vamos a construir como referente lo que tendría que ser una nueva institución que tenga un carácter municipal duradero, ya que respeta la territorialidad de nuestro pueblo y porque lo forman los ayuntamientos, la institución más cercana a la población".La declaración final del documento de HB añade: "Necesitamos una institución y un referente político que exprese que somos una nación, tanto a nivel interno como a nivel internacional. Y necesitamos una institución que reúna los seis territorios y respete la territorialidad, superando así la actual partición política y administrativa".

Carlos Garaikoetxea, entretanto, también se refirió a la asamblea de municipios en la reunión de 464 concejales y 46 alcaldes de EA. A su juicio, se ha alentado una "confusión interesada" a cargo de los "adversarios del nacionalismo vasco", porque quienes aseguran que este organismo pretende suplantar las instituciones emanadas de las urnas "están muy confundidos".

El contrapunto a estas opiniones procedió del secretario general del PSE, Nicolás Redondo Terreros, quien proclamó un acuerdo, basado en el diálogo, entre nacionalistas y no nacionalistas. Acusó a los convocantes de la Asamblea de Representantes Municipales de Euskal Herria de "no querer contar con los partidos no nacionalistas en el proceso de paz", y reclamó un entendimiento entre el Gobierno central, el PP y el PSOE para establecer una estrategia pacificadora conjunta. Redondo Terreros criticó al lehendakari, Juan José Ibarretxe, por "entregarse a EH" en lugar de buscar una unidad de acción entre todos los partidos y le exigió que convoque la Mesa de Ajuria Enea para discutir si "los partidos democráticos invitan a HB a aceptar las reglas democráticas y condenar la violencia".

El dirigente socialista acusó a Ibarretxe de perseguir una "rentabilidad política" en su intento de constituir un nuevo foro de paz, y apreció en la actitud del lehendakari una "justificación claudicante" con los deseos de HB. Redondo Terreros afirmó: "A mí me gustaría estar en un foro junto a HB, pero me disgustaría más dejar la iniciativa pacificadora en manos de este partido, que es lo que está ocurriendo con Ibarretxe y el PNV".