Hingis conquista Australia por tercer año consecutivo

La suiza Martina Hingis se adjudicó por tercer año consecutivo el Abierto de Australia, el primer grande de la temporada, tras derrotar ayer en la final a la francesa Amelie Mauresmo por 6-2 y 6-3. Hingis, segunda cabeza de serie, logró la victoria -"un triunfo mental", lo calificó-, después de una hora y siete minutos de juego, en la séptima bola de partido de la que dispuso.En su todavía corta carrera, Hingis, de 18 años, ha ganado ya cinco grand slam (también ha vencido una vez en Wimbledon y otra en el Open USA). Sólo le queda Roland Garros. Para Mauresmo, de 19, ésta era su primera final en un grande.

La tenista suiza dominó ayer la final de principio a fin. No se dejó intimidar por los músculos de la francesa ni por su poderoso juego de revés. Mauresmo, la sensación del torneo, defraudó por su falta de consistencia. Estuvo más lenta que de costumbre y sirvió de forma horrible (un acierto del 46% en primeros servicios, por 69% de la suiza). Se lo jugó todo a golpes ganadores, una estrategia suicida cuando enfrente se encuentra Hingis. Aunque Mauresmo logró así 31 puntos, pagó a cambio la apuesta con 41 errores no forzados. A la suiza le bastó con jugar de forma conservadora, esperar el fallo de la rival, y, eso sí, ser letal en la red: lo fue en 15 de sus 18 subidas.

Tras ganar el partido, Hingis se dirigió a los espectadores y les arrojó las raquetas. Luego, pidió perdón a Mauresmo por definirla como "un medio hombre" en la víspera y elogió algunos aspectos de su juego: "Tiene el mejor revés del circuito. Ninguna jugadora imprime tanto efecto a sus golpes. Pero yo soy mentalmente más fuerte y por eso gané".

La francesa, por su parte, admitió la superioridad de Hingis, sobre todo, "porque maneja la presión de forma extraordinaria". Mauresmo no pudo ofrecer el título a su novia, Sylvie Bourdon, que estuvo en la grada, ni a su entrenador, Christophe Fournerie, pero a ambos les dedicó sus mejores palabras en la entrega de trofeos: "Gracias por estar aquí conmigo.Os amo a los dos".

Por otro lado, la final masculina de dobles fue para la pareja formada por el sueco Jonas Bjorkman y el australiano Patrick Rafter, que derrotaron a los indios Mahesh Bhupathi y Leander Paes, los grandes favoritos, por 6-3, 4-6, 6-4, 6-7 (10-12) y 6-4.