Pasión por Magritte

No hacía ayer "un tiempo de Magritte", según una expresión acuñada por Max Ernst en referencia a los cielos azules y claros del pintor surrealista belga. Las negras nubes se alternaban con los claros y en algún momento más de uno temió, mientras aguardaba en la larga cola, que empezara a llover. Pero la pasión por Magritte se ha instalado en Barcelona y ni las nubes negras impidieron que ayer la Fundación Miró, que acoge desde el pasado 20 de noviembre en su sede una exposición dedicada al artista surrealista belga en el centenario de su nacimiento, registrara el récord de visitas, con más de 3.000 personas, desde que la exhibición abriera su puertas. El récord de visitas en un solo día lo sigue ostentado todavía la exposición conmemorativa del centenario del nacimiento de Joan Miró, con 3.200 visitantes. Con los 3.000 de ayer, el número de visitantes de la exposición dedicada a Magritte es de 50.000, con una media diaria de 1.365 personas. Los responsables de la Fundación Miró no se explicaban por qué ayer la exposición congregó a tanta gente. "Desde que han empezado las fiestas navideñas, el público se ha incrementado con respecto a las semanas anteriores", explicó un portavoz del centro. "Hoy ha sido el día más fuerte de los 36 en que ha permanecido abierta la exposición; muy por encima de los dos primeros fines de semana tras la inauguración". Los visitantes que acudieron ayer a la exposición conmemorativa del centenario del nacimiento de Magritte eran principalmente turistas, sobre todo italianos y franceses.