CDC asegura que ha comprado su nueva sede a precio de mercado
El secretario general de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), Pere Esteve, aseguró ayer que su partido ha comprado su nueva sede, situada en la calle de Còrsega de Barcelona, a precio de mercado, rechazando así la información aparecida en EL PAÍS en la edición del 25 y 26 de diciembre. Esteve indica en una nota de la secretaría general de CDC: "La compra del edificio (...), de 4.000 metros cuadrados, se realizó por 625 millones de pesetas, precio que efectivamente no es el del mercado para locales que tienen infraestructura de utilización inmediata, pero sí lo es para solares, como reconoce el antiguo propietario y recoge la información facilitada por ustedes". La nota detalla que el edificio, para ser ocupado, necesita una inversión de 400 millones de pesetas, pues en caso contrario no cumpliría las ordenanzas municipales. Esto obligará a rehabilitar la fachada y a derribar todo el interior del inmueble. La nota de CDC subraya que la inversión total, entre compra y rehabilitación, es de 1.025 millones, lo que, dice, "sitúa el precio del edificio en más de 250.000 pesetas por metro cuadrado, precio que tal como publicó su diario es el de los edificios de oficinas que ya están preparados desde el momento de la compra para ser utilizados". La venta de este edificio, hasta ahora propiedad de ENHER, a CDC ha suscitado una pregunta en el Parlament del diputado de Esquerra Republicana de Catalunya Francesc Ferrer Gironès y la crítica del presidente del Grupo Socialista, Joaquim Nadal. Ambos han establecido una relación entre la transacción inmobiliaria y la política eléctrica del Gobierno de la Generalitat. Más concretamente, Nadal ha mencionado el apoyo de CDC a la operación de titulización de los costes de transición a la competencia de las compañías eléctricas, y Ferrer Gironès, la cesión de una polémica línea de alta tensión en las Gavarres.
