El Barça toma cuerpo

El Barça de Aíto García Reneses empieza a tener buena pinta. Tiene solidez -el Real Madrid la pondrá a prueba la semana próxima-, entretiene y es capaz de dar cuenta de todo un señor equipo como demostró ser ayer el Caja San Fernando. Fue un buen partido. Se decidió en el suspiro final. Romero, un jugador que ha progresado de una forma espectacular, puso a tiro de piedra al equipo sevillano cuando faltaban poco más de 30 segundos para el final: 67-65. Esteller falló un triple a siete segundos para la conclusión y Turner no acertó en su intento de darles la victoria a los suyos con otro lanzamiento desde más allá de la línea de 6,25 metros. Pero el encuentro dio mucho más de sí que las peripecias de última hora.El Caja San Fernando, de la mano de Javier Imbroda, ha sabido construir un arsenal que da mucho de sí. Ayer le fallaron un par de jugadores de banquillo, como Salva Díez y Kornegay, pero en todo momento ofreció el equipo sevillano un rendimiento notable, incluso en los momentos menos brillantes de su extraordinario base Andre Turner, al que para ser más exactos llevó por la calle de la amargura Nacho Rodríguez. El Caja San Fernando llegó a mandar por cuatro puntos en la recta final (48-52). Llevó el partido a donde quería. Pero en ese momento Nacho Rodríguez, ayer solo al timón del equipo azulgrana debido a la nueva lesión que arrastra Djordjevic, sacó a relucir su capacidad para manejar el ritmo de los acontecimientos a su conveniencia aunque para ello tuviera que cometer una falta técnica. Pero acabó descentrando lo suficiente a Turner. El Caja San Fernando echó de menos las canastas de Scott en el primer tiempo. Dueñas, cada vez más capacitado para mantener la intensidad que requieren partidos de altos vuelos -el de ayer parecía ya de eliminatorias finales-, y Rentzias barrieron dentro de la zona. Y por ahí y por las pérdidas de balón se le fue yendo el partido al Caja San Fernando. Tuvo excusa: el Barça empieza a tomar cuerpo.