Móstoles gasta 80 millones en enterrar 650 metros de tendido eléctrico

Los 45.000 voltios de potencia de la línea de alta tensión que discurre sobre el Camino de Moraleja de Enmedio, en el casco antiguo de Móstoles (196.500 habitantes), dormirán bajo tierra dentro de algunas semanas. La comisión de gobierno local ha aprobado 80 millones de pesetas para enterrar los 650 metros de longitud de los cables.La empresa que deberá hacer el trabajo es Iberdrola, y el dinero procede de las arcas municipales (60 millones) y de una subvención regional (20 millones restantes). Esta línea es una de las más antiguas del municipio, cuyas torres se sitúan a escasos metros de las viviendas y a las puertas del cementerio viejo. "Con el soterramiento pretendemos liberar a esta zona de Móstoles del fuerte impacto urbanístico, sanitario y visual producido por los cables de alta tensión", comentó el alcalde mostoleño, José María Arteta, del PSOE. Aún quedan en la localidad varios kilómetros de líneas de alta tensión por enterrar. Una de ellas pasa por encima del nuevo campus de la Universidad Rey Juan Carlos (el Gobierno regional habilitó un crédito hace meses para eliminarla) y el barrio de Los Rosales, y otra sobrevuela la zona de la urbanización Villafontana, donde residen más de 8.000 personas.