El nuevo presidente de Convergència Democràtica en Tarragona asume la elaboración de las listas electorales
El nuevo presidente de CDC de Tarragona, Joan Aregio, asumirá personalmente la elaboración de las listas electorales y por tanto no delegará esta función en ningún secretario de política municipal como sucedía hasta el momento. Aregio someterá esta noche a votación de la ejecutiva provincial el nombramiento de dos vicepresidentes y de un nuevo secretario de organización. Joan Aregio no quiere cometer los mismos errores que su predecesor en el cargo, el alcalde de Vila-seca, Josep Poblet, es decir, delegar funciones ejecutivas en alguna persona claramente identificada con uno de los dos sectores enfrentados hasta ahora, el oficialista y el crítico. A Poblet esta política le costó el cargo, y además provocó un mayor distanciamiento entre ambos sectores: el oficialista, integrado por seguidores suyos, y el crítico, encabezado por el presidente de la Diputación de Tarragona, Josep Mariné. De acuerdo con los pactos alcanzados el pasado 11 de noviembre en Barcelona, cuando se acordó la sustitución de Poblet al frente de CDC en Tarragona, la ejecutiva intercomarcal convergente tendrá dos vicepresidencias, que se repartirán dos personas de cada sector. Una de ellas recaerá en Lluís Badia, presidente de la autoridad portuaria y miembro del ala oficialista, y la otra en Joan Maria Roig, alcalde de Amposta y uno de los dirigentes del sector crítico. Joan Aregio todavía no ha decidido si estas vicepresidencias serán ejecutivas o, por el contrario, tan sólo tendrán carácter protocolario. Badia era hasta ahora el secretario de política municipal, lo que le proporcionaba manos libres en la elaboración de las listas para las próximas elecciones locales. Fuentes del partido informaron de que con toda probabilidad esta noche Aregio propondrá para el cargo de secretario de organización al presidente del Tarragonès, el abogado Juli Gens, quien durante toda la crisis convergente ha intentado mantenerse al margen para no ser identificado con ninguna de las dos fracciones. El parlamentario catalán Josep Sánchez Pagès, hombre de confianza del consejero de Cultura, Joan Maria Pujals, ocupaba la secretaría de organización. Aunque la dirección de Convergència en Tarragona intenta evitar que ante el partido y la opinión pública alguno de los dos sectores haya resultado ganador, la verdad es que los críticos han obtenido mayor ventaja de toda la crisis. Han visto cumplido su principal objetivo, el cese de Josep Poblet, y aunque no se le sustituyó por el candidato que ellos presentaban, Joan Maria Roig, el nuevo presidente provincial ha empezado su mandato quitando poder a los oficialistas.
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