_
_
_
_
_
Entrevista:

"Tener un empleo facilita la salida después de una agresión"

Concepción Dancausa es abogada, feminista y, desde 1996, directora del Instituto Nacional de la Mujer. Aunque siempre fue una fiel defensora de la igualdad, confiesa que el gusanillo por involucrarse más intensamente le picó tras asumir la Subdirección de ONG del Ministerio de Asuntos Sociales. Allí entró en contacto con un sinnúmero de asociaciones feministas. Desde entonces, ha hecho de la igualdad de oportunidades su causa. P. En los congresos siempre se escuchan quejas parecidas ¿Es que no se avanza? R. Los avances son muy lentos, me gustaría que fueran más rápidos, pero es muy difícil cambiar concepciones consolidadas durante 19 siglos. Si miramos de donde partimos, en 25 años hemos avanzado mucho. Si miramos a donde queremos llegar, el avance es muy lento. P. Hay un planteamiento nuevo. Que vida laboral y familiar deben compatibilizarse y son las mujeres quienes lo introducen... R. Claro porque hay cuestiones que los hombres las tienen resueltas. Ellos no se plantean esa conciliación porque no les afecta; saben que siempre está la mujer resolviendo los problemas domésticos; quienes lo sufrimos somos nosotras. Muchas mujeres tienen la posibilidad de acceder a un puesto de más responsabilidad, pero no lo aceptan porque les dificulta tanto su vida familiar que prefieren quedarse donde están, porque sigue siendo nuestra responsabilidad. Si fuera compartida, la situación cambiaría. P. Al conciliar vida familiar y laboral, ¿la mujer perpetúa su rol? R. No porque esa conciliación significa compartir; conciliar vida laboral y familiar pero tanto hombres como mujeres. Es una necesidad que expresan todas las mujeres, tanto las que quieren empezar hasta las que quieren tomar un curso de formación. Si es que muchas veces no pueden hacerlo salvo que sea en horario de trabajo porque salen disparadas porque tienen en casa a los niños o a una persona mayor. P. ¿La mujer prioriza la familia al trabajo? R. Es cierto que se veía el empleo como secundario, pero eso está cambiando cada vez más. La mujer debe recuperar tiempo de vida personal y que ellos apechuguen. Las mujeres tienen las mismas ambiciones que los hombres, pero están condicionadas. P. Las estadísticas dicen que las mujeres maltratadas soportan agresiones durante 10 años antes de denunciarlas. ¿Eso cambia cuando se tiene un empleo? R. El problema es doble si además de sufrir malos tratos no tienen dinero. Las que están trabajando pueden romper esa situación con más facilidad. La causa no es la situación económica, pero tener un empleo facilita una salida para rehacer la vida.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_