Madrid y Valencia sólo financiarán las obras del AVE en sus límites territoriales

Madrid - 19 nov 1998 - 00:00CET

Los gobiernos del Partido Popular en Madrid y Valencia no regalarán dinero al Ejecutivo de Castilla-La Mancha (PSOE) para el tren de alta velocidad. Sólo financiarán las obras de esta infraestructura dentro de los límites territoriales de las dos regiones.El presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, tiene hoy una doble cita con su homólogo de la Comunidad Valenciana, Eduardo Zaplana. Los dos mandatarios regionales del PP rubricarán, primero en Valencia y luego en Madrid, el protocolo de colaboración entre ambas comunidades para hacer realidad una línea ferroviaria de alta velocidad (a una media de 250 kilómetros por hora) que sitúe Madrid a 80 minutos de Levante. Ruiz-Gallardón, tanto como Zaplana, que estarán acompañados durante la firma por sus consejeros de Obras Públicas y por delegaciones empresariales de ambas regiones, están dispuestos a financiar esa infraestructura con 200.000 millones (la mitad de su coste).

Los otros 200.000 millones saldrán de los presupuestos del Estado. Con esos 200.000 millones, los técnicos del Ministerio de Fomento pretendían reconvertir la línea actual (Madrid-Valencia) en una de alta velocidad en la que los trenes alcanzaran los 200 kilómetros por hora, inferior a la que reclaman los empresarios para impulsar el intercambio comercial entre ambas comunidades. Ruiz-Gallardón y Zaplana acordaron en un primer momento financiar el 50% del proyecto sin "pedir ni una peseta a Castilla-La Mancha", autonomía por la que no sólo pasarán los raíles, sino que también tendrá parada propia en Albacete. Esta comunidad, gobernada por el socialista Juan José Bono, manifestó que no estaba dispuesta a poner dinero para una infraestructura que es competencia estatal.

El Secretario de Estado de Infraestructuras, Albert Vilalta, que compareció ayer en el Senado, matizó que la participación de los Gobiernos regionales de Madrid y Valencia se ceñirá a su ámbito territorial, lo que significa que no financiarán una parte de la infraestructura que atraviesa Castilla-La Mancha, como en un primer momento había anunciado el PP.

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Tren a Valladolid

Las empresas que financien el AVE podrán participar en los beneficios, según el PP

Fernando Fernández Tapias acudirá a la reunión de hoy con el ánimo de plantear al presidente regional la necesidad de impulsar también la línea de velocidad alta a Valladolid y todo el cuadrante norte-noreste de la Península."El AVE a Valencia tiene una importancia fundamental, tanto para el turismo como para el tránsito de mercancías con el puerto de España más cercano a Madrid. Pero creemos que para el desarrollo de la región no hay que limitarse a pedir esa línea férrea. La apuesta hay que ampliarla a la línea rápida a Valladolid y norte de la Península", afirma el portavoz de la CEIM.

Los trabajos para esa línea, proyectada por Fomento, empezarán el año próximo en el tramo comprendido entre Valladolid y Segovia. No hay aún plazo, en cambio, para el tramo más conflictivo de todos: atravesar el macizo montañoso de Guadarrama con un tren que, para ser competitivo, debe acercarse a los 200 kilómetros por hora. Fomento convocó en octubre pasado un concurso de proyecto y obra para que sean las propias empresas las que evalúen el coste y las dificultades de realizar un túnel de unos 30 kilómetros, tal y como propuso la Comunidad.

La posibilidad de acometer esa obra no se conocerá hasta el verano próximo, con las elecciones autonómicas ya celebradas. Quizá por ello, Ruiz-Gallardón, que en un primer momento rechazó poner dinero para el AVE a Valencia si el ministerio no se lo devolvía después, ha decidido finalmente apostar por este proyecto. Esa línea situará Valencia (donde veranean casi un millón de madrileños) a 80 minutos de Madrid. Llegar a Alicante supondrá unos 105 minutos. Albacete estará a una hora justa.

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