La III Muestra de Cine Africano rinde homenaje a Idrissa Ouedraogo

La asociación cultural L"Ull Anònim organiza a partir de mañana en los cines Icària la III Muestra de Cine Africano, una cuidada selección de filmes realizados en los últimos años en diversos países del África subsahariana. Por encima de esa selección destaca la retrospectiva dedicada al director de Burkina Faso Idrissa Ouedraogo, un viejo conocido de quienes frecuentan los festivales internacionales, aunque su obra no ha tenido apenas difusión en España. De este director se podrán ver tres cortos y seis largometrajes que abarcan desde sus comienzos en el medio, en 1985, hasta su película más reciente, Kini Adams, rodada el año pasado. Nacido en 1954 y formado en el Instituto Africano de Cine y Televisión de Ougadougou, del que fue expulsado por su militancia estudiantil, Ouedraogo cursó posteriormente estudios en Kiev y en el célebre IDHEC de París, donde se graduó en 1985. Su nombre saltó a la notoriedad ya con sus primeros cortometrajes, entre los cuales Issa le tisserand (1985) destacó por su denuncia de la invasión de productos de consumo extranjeros en el África negra. Pero la fama le llegó tras dos filmes notables, Yaaba (La abuela, 1988) y Tilaï (La ley, 1990), que ganó el gran premio del jurado en el Festival de Cannes de aquel año. La segunda propuesta del ciclo consiste en una selección de películas de diversa procedencia, entre las que destaca, por su volumen y por la importancia que el país tiene en el concierto de las menguadas cinematografías nacionales africanas, la producción senegalesa. TGV (1997), segundo largometraje de Moussa Touré sobre un complicado viaje en autobús entre Dakar y Conakry (Guinea); Le II commandament (1997), ópera prima de Mama Keita, una historia de amistades traicionadas entre un negro y un blanco que nacen el mismo día y crecen juntos, y Ainsi soit-il (1997), de Joseph Gai Ramaka, un enigmático filme cargado de simbolismo, componen el lote. El ciclo se completa con una película surafricana -Fools (1997), de Ramadan Suleman, centrada en un oscuro profesor, militante antiapartheid aunque igualmente violador de una joven alumna-, otra congoleña -Pièces d"idéntité (1998), de Mwézé Ngangura, sobre el viaje de un anciano rey local en busca de su nieta, que estudia en Bélgica y de la cual no tiene noticias- y una tercera de Costa de Marfil -La jumelle (1998), de Lanciné Diaby, una historia de gemelos separados a la fuerza. El ciclo concluirá el próximo 15 de noviembre.