Los taxistas de Bilbao aplicarán a principios de 1999 un sistema que impida trabajar más de 12 horas al día

Los taxistas bilbaínos empezarán a aplicar a principios de 1999 la jornada máxima de 12 horas de trabajo, después de que el pleno del Ayuntamiento haya aprobado una subvención de 50 millones de pesetas destinado a los equipos técnicos necesarios. El control se realizará con un aparato, similar al taxímetro, instalado en los vehículos, que ya se ha utilizado de forma experimental en los últimos meses. El Ayuntamiento convocará ahora un concurso para adjudicar la instalación de los aparatos, que los profesionales calculan "que estarán en marcha en unos meses". La implantación de la jornada de 12 horas en el sector del taxi en Bilbao partió del consistorio de la capital, que tiene competencias legales en este asunto. Actualmente, los 774 taxistas bilbaínos trabajan a diario una media de 14 horas, pero hay casos de 18 o incluso 20 horas del día. Estas largas jornadas saturan aún más la gran oferta existente. El pleno municipal aprobó también el jueves el convenio de financiación de la reordenación del sector, el primero de este tipo en Euskadi, que supondrá la eliminación de 100 licencias en los próximos cinco años. En este caso, el coste del plan, de 1.141 millones de pesetas, recae sobre los taxistas, aunque podrán disponer de créditos blandos gestionados con la BBK. Un portavoz del colectivo reveló que han presentado a esta entidad bancaria la opción de insertar publicidad en los vehículos a cambio de lograr condiciones más ventajosas. El plan de reordenación establece el pago de 10,8 millones de pesetas, actualizable cada año, a quien se desprendas de su licencia. Tras la aprobación del convenio en el pleno, el sector deberá ratificar definitivamente el proyecto en una asamblea general de los 774 profesionales, que se celebrará el próximo mes. Aunque no hay todavía una fecha concreta, la intención es que la reestructuración comience en noviembre o diciembre. El plan prevé aportaciones económicas progresivas cada año, que serán de menor cuantía en el primer lustro -5.000, 25.000, 40.000, 55.000 y 70.000 pesetas aproximadamente- y a partir de entonces superarán las 300.000 pesetas anuales. Así, cada uno de los 674 taxistas que quede en Bilbao habrá pagado cerca de dos millones en 10 años. El último pleno aprobó asimismo las tarifas para 1999, que establecen la bajada de bandera en 425 pesetas, 10 más que ahora, en el caso de las jornadas diurnas laborables. Los festivos y, durante la noche, el precio mínimo queda en 525. Además, se mantiene la autorización de la tarifa festiva desde las 15 horas del sábado y el complemento por el transportes de perros.