Zarrías reitera que si no hay acuerdo se recurrirá al Constitucional

El consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, dijo ayer en Huelva que la Junta siempre ha querido mantener diálogo y buenas relaciones con el Gobierno central, pero sin renunciar nunca a los derechos de Andalucía. Por eso, el Ejecutivo andaluz va a exigir que la rectificación del Gobierno de Madrid sobre la política de enfrentamiento con la Junta, tras las conversaciones mantenidas entre Manuel Chaves y los ministros Mariano Rajoy y Javier Arenas, se plasme en los Presupuestos Generales del Estado de 1999. De lo contrario, la Junta recurrirá esos presupuestos ante el Tribunal Constitucional. Las principales reivindicaciones del Ejecutivo autonómico consistirán en las transferencias de las políticas de aguas y empleo, y en el reconocimiento del censo real andaluz, lo que supondrá que el Estado aporte una partida de 124.000 millones de pesetas más a la comunidad. "Andalucía no es tierra que quiera pelea, pero no podemos hacer dejación de lo que son nuestros derechos", afirmó Gaspar Zarrías. El consejero, que mantuvo un encuentro con colectivos de mujeres en Huelva, subrayó: "Clama al cielo que el Estado no reconozca a 400.000 andaluces que cada día pasean por la calle". El Gobierno andaluz pretende que la Comisión de Transferencias se reúna lo antes posible, tras los trabajos que están manteniendo las comisiones técnicas, para tratar el traspaso a Andalucía de la Confederación Hidrográfica del Sur, y de las políticas activas de empleo. "La Junta está realizando un intento para que el Gobierno de la nación rectifique. No existe justificación alguna para que a Andalucía se le dé un trato discriminatorio respecto a otras comunidades que accedieron a la autonomía por la vía rápid", dijo. Para Zarrías, "Andalucía sólo pide aquello a lo que tiene derecho, porque de lo contrario se nos está infringiendo un mal trato que no viene bien ni al PP".