Un edil acusa a Gil de exigirle firmar papeles en blanco del 'caso Marbella'
Un ex concejal del GIL, el partido de Jesús Gil, aseguró ayer que el alcalde de Marbella y presidente del Atlético de Madrid, le amenazó y presionó para que firmara "papeles en blanco" relacionados con los contratos de publicidad celebrados entre el Ayuntamiento y el equipo de fútbol. Carlos Fernández, ex responsable del área de Deportes y ahora contrincante de Gil en varias causas judiciales, asegura que se negó a cerrar un trato con el alcalde, quien le ofreció su silencio en un supuesto caso de apropiación indebida de dinero a cambio de firmar a ciegas. Gil negó ayer estas acusaciones y se lanzó contra el juez y el fiscal que investigan los contratos de publicidad. "Forman una piña y son íntimos amigos", dijo.
El ex concejal del GIL -ahora en el Grupo Mixto- mantuvo ayer que el presidente del Atlético de Madrid le puso los papeles en blanco por delante y le advirtió: "Si decides no firmar los documentos que están sobre la mesa, vamos a tener un lío y vas a tener un follón". Fernández sostiene que esos documentos tenían relación con la publicidad de Marbella, que desde la temporada 91/92 luce en sus camisetas el equipo de Gil. El alcalde llevó a su ex concejal de Deportes a los juzgados hace seis meses bajo la acusación de haberse quedado con las primas del equipo municipal de San Pedro (barrio marbellí). Fernández contraatacó querellándose contra Gil por difamación, precisamente porque el alcalde le expulsó de la Corporación acusándole de esa apropiación indebida.
Gil fue benévolo ayer con su ex compañero -"quiere subirse al carro de la confusión", dijo de él- y prefirió concentrarse en la operación desplegada el martes por la Fiscalía Anticorrupción y el Juzgado de Instrucción número 7 de Marbella para aclarar si hubo fraude y malversación en los contratos de publicidad entre el Ayuntamiento y el Atlético de Madrid.
"Desmontar esta falacia"
El alcalde afirmó, a través de un comunicado, que "es fácil desmontar esta falacia, ya que la denuncia es de 1996 y en junio, el Atlético de Madrid y el Ayuntamiento de Marbella contestaron adecuadamente" al fiscal Anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo. Jesús Gil y su equipo de Gobierno lanzaron el comunicado, para acusar a Jiménez Villarejo de "formar una piña" con el titular del Juzgado número 7, Santiago Torres, que dirigió los registros en el Vicente Calderón y el consistorio, y "planificar minuciosamente en Madrid" una operación "tipo antidroga, estilo Garzón o antiterrorista, con zulo incluido".
El juez Torres paralizó recientemente una obra en Marbella que ocupa parte de suelo público y que levanta 13 plantas donde el actual plan urbanístico sólo autoriza tres alturas. El alcalde asegura que Torres no es competente en este asunto y que debe abandonarlo para dejar el caso del edificio Belmonsa en manos del Juzgado de Instrucción número 1.
La justicia, mientras tanto,tiene abierto otro frente contra Jesús Gil en Estepona, el pueblo de al lado de Marbella del que es alcalde Jesús Gil Marín, hijo del presidente del Atlético. Un juzgado de Estepona ha admitido a trámite un expediente de quiebra necesaria contra la sociedad municipal Obras Estepona XXI, a instancias de la empresa Constructora Asturiana, SA. El procedimiento judicial se inició por el impago de deudas a esta sociedad, según denunció ayer el PP.
Obras Estepona XXI fue creada por el GIL (Grupo Independiente Liberal), partido que, según la empresa denunciante, no le ha pagado un duro desde que se hizo con el poder en la ciudad costera en 1995. El Grupo Socialista de Estepona salió ayer también a la palestra para asegurar que varios ediles del GIL crearon empresas privadas y después vendieron al Consistorio un porcentaje mayoritario, por lo que "éstas no son municipales totalmente".
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