Pujol y Duran se reúnen para revisar las listas municipales de CiU

/ Barcelona [EN] La cúpula de Convergència Democràtica (CDC) y Unió Democràtica (UDC) se ha reunido en los últimos días para tratar de desbloquear la confección de las listas municipales. Tras semanas de fricciones continuas por la elaboración de las candidaturas de la coalición nacionalista CiU, el líder de CDC, Jordi Pujol, y el de UDC, Josep Antoni Duran, se reunieron el viernes para reactivar el proceso, asunto que han tratado también a solas los secretarios generales de ambas formaciones.

Duran, que se reunió ayer en Salo (Sant Mateu de Bages) con militantes de su partido, rehusó desvelar el contenido de las conversaciones, pero afirmó: "Nosotros [UDC] tenemos derecho a un 25% de representatividad, porcentaje que ahora no tenemos". El dirigente democristiano especificó que espera poder cerrar cuanto antes esta negociación y afirmó que su deseo es llevar a buen término el diálogo y la negociación. "La coalición tiene necesidad de resolver la negociación cuanto antes porque nos debemos dedicar sin fisuras a preparar la recta final de las elecciones al Parlament". El líder democristiano denunció recientemente que las negociaciones para elaborar las candidaturas municipales de la coalición se encontraban bloqueadas y achacó las culpas a la actitud de CDC, que, en su opinión, no tiene en cuenta el crecimiento que ha experimentado Unió en los últimos años. Las críticas de Duran, que coincidieron con su intento frustrado de convertirse en el número dos de Jordi Pujol con vistas a las autonómicas, fueron rechazadas tajantemente en su día por el secretario general de CDC, Pere Esteve, quien negó que las negociaciones estuvieran bloqueadas. Con los contactos de los últimos días se trata de superar la polémica e impulsar el laborioso proceso de pactar las listas en los más de 900 municipios catalanes. El secretario general de Unió, Ignasi Farreres, admite que en su reciente reunión con Esteve decidieron dar instrucciones a los secretarios de política municipal de ambas formaciones para "acelerar los encuentros locales y dar un impulso al proceso". En contraposición con la indignación mostrada por su líder, Farreres negó que las negociaciones de este año sean más complicadas que en otras ocasiones y elogió la actitud de Esteve, quien, a su juicio, "desea resolver cuanto antes los problemas". "Pienso que a finales de este mes tendremos resultados concretos y un avance fuerte y rápido", explicó. Durante su visita al Bages, Duran se mostró contrariado por la bipolarización entre bloques nacionalistas y españolistas que a su juicio se está produciendo en España. Afirmó: "No es bueno ni positivo tener dos bloques enfrentados, porque en definitiva debemos hablar entre todos". A su juicio, ahora no es momento de confrontación, de frentes y de bloques, sino de diálogo para obtener la relectura de la Constitución que propone CiU. El líder de UDC recordó que toda modificación de la Carta Magna y de las leyes fundamentales debe tener la aprobación de uno de los partidos mayoritarios. Así, dijo que la reforma de la ley orgánica de financiación de las comunidades autónomas (uno de los objetivos de CiU) necesita los votos del PSOE y del PP. "Incluso tener sólo los votos de una de las dos formaciones no es útil porque las mayorías pueden cambiar", dijo.