El Athletic hizo valer un gol

Un soberbio gol de Urzaiz dio la victoria al Athletic de Bilbao. Pero el equipo de Luis Fernández sigue suscitando dudas. Enfrascado en bruscas oscilaciones, rentabilizó al máximo un partido gris. El encuentro se debatió en esos cambios que caracterizan a los leones. Un periodo de fútbol espeso, sin imaginación, de bajísima cotización. Y tras el descanso, el valor emergente del gol. La intermitencia como desasosiego y la victoria como virtud.Luis Fernandez reafirmó de salida sus preocupaciones ante una temporada larga y tensa y acudió otra vez a los cambios. De salida, sólo cinco titulares del partido ante el Rosenborg. Había advertido que lo importante era no perder y puso condiciones y maneras para ello.

El Extremadura trató de jugar como de costumbre. Eraña y Pedro José bajaron el balón, con el apoyo de Bogdanovic. Cierto que el esférico se desgarraba en el contacto con el maltrecho césped, pero los azulgranas mostraron un mínimo de intenciones. Buscaron apoyos con lanzamientos cortos para que Rueda y Duré ganaran las posiciones a Ríos y Carlos García.Tras el descanso, el Athletic exhibió otras intenciones y acumuló dos ocasiones consecutivas. Y luego, el valor del gol.