El PSPV acusa al Consell de deteriorar el sector público y las libertades para beneficiar a sus amigos

El portavoz socialista, Antonio Moreno, articuló ayer un discurso bien hilvanado y mejor preparado que en anteriores ocasiones. Un discurso de oposición con aspiración de gobernar y con menos titubeos que otros años. En su intervención, Moreno esgrimió dos ideas fundamentales: el Consell de Eduardo Zaplana, por acción u omisión, ha deteriorado paulatinamente el sector público y las libertades, limitándose a practicar el centrismo sólo de palabra, y el PSPV ha ejercido una oposición responsable demostrando su predisposición a pactar en cuestiones de interés general.

Antonio Moreno hizo una recapitulación de hechos para intentar demostrar que el Consell de Eduardo Zaplana ha propiciado una "legislatura de sobresaltos". La implicación del ex consejero Luis Fernando Cartagena en un supuesto delito fiscal, las mentiras en el currículo de la consejera de Agricultura, el asalto a la autonomía universitaria y los enfrentamientos con el rector de Alicante, la dimisión de un director general de Interior por irregularidades urbanísticas y el escándalo del contagio masivo de hepatitis C, fueron algunos de los "sobresaltos" enumerados por el portavoz socialista. Antonio Moreno recordó al presidente Zaplana a lo largo de su intervención que las carteras de Medio Ambiente y de Agricultura también son su responsabilidad. El portavoz socialista esgrimió la situación de los humedales valencianos, las crisis provocadas por la falta de solución al problema de los residuos y la paralización de la política de repoblación de bosques quemados como cuñas que jalonaron su discurso. En todas estas cuestiones, el presidente de la Generalitat se desentendió e hizo oídos sordos, probablemente a la espera de que hoy el portavoz regionalista Fermín Artagoitia defienda la gestión de los citados consejeros. La intervención del portavoz parlamentario del PSPV estuvo avalada por abundante documentación estadística, obtenida en la mayoría de los casos de las propias administraciones gobernadas por el Partido Popular. Para los socialistas, una de las principales prioridades es el problema del paro y cómo salir de él. Moreno reconoció que algunos de los indicadores económicos eran buenos pero advirtió que eran, en general, peores que en el conjunto del Estado y que el crecimiento se estaba ralentizado. En su discurso, el portavoz socialista puso de manifiesto la paralización de las inversiones, fundamentalmente en materia de infraestructuras, lo que no ha impedido un crecimiento galopante del endeudamiento de la Generalitat, en especial de los gastos de personal y funcionamiento de la Generalitat. En materia social, el PSPV acusó al Consell de haber impulsado un rápido deterioro de servicios públicos esenciales como la sanidad y la educación. Moreno explicó que las listas de espera han crecido y que se han paralizado las inversiones para hacer planes de choque que beneficien al sector privado. Moreno acusó al PP de haber provocado las "huelgas salvajes de médicos y farmacéuticos" en vísperas de las elecciones autonómicas de 1995. En materia de servicios sociales, Antonio Moreno utilizó el programa electoral del PP que llevó a Zaplana a la Generalitat para asegurar que todas las promesas se han convertido en humo. En su primer turno de réplica, Zaplana se dedicó cerca de 20 minutos a descalificar a la oposición, el liderazgo de Moreno y la gestión de los 12 años de gobierno socialista. Moreno instó a Zaplana a hablar de politica y a gobernar y no a mirar hacia el pasado. El portavoz socialista tampoco se dejó en el tintero la propanda y la censura del PP en Canal 9.