Stankovic aúpa al Mallorca

El Mallorca vuelve por sus fueros. Acabó con el Espanyol con la misma contundencia y precisión con la que resolvió muchos encuentros la pasada Liga. La máquina creada por Héctor Cúper sigue funcionando a la perfección, casi sin fisuras. El Espanyol visitaba el Luis Sitjar con el objetivo de alcanzar el liderato, pero se marchó dejando serias dudas sobre su potencial, especialmente el ofensivo.Mallorca y Espanyol fueron generosos intérpretes del pensamiento futbolístico de dos estrategas consumados, Cúper y Bielsa, forjados en la escuela argentina de la disciplina táctica y el toque sutil. Dos concepciones tan parecidas del juego dejan muy poco margen a la improvisación y sí, y mucho, al talento individual. Cúper dota a su equipo de un sentido futbolístico, le enseña a situarse en el campo y espera que sus jugadores más determinantes completen la labor de equipo. Lo mismo hace Bielsa. Ayer debutaban dos jugadores, Niño, en el Mallorca, y Domínguez, en el Espanyol, pero esa circunstancia no se notó en los esquemas de ambos conjuntos.

El orden inicial del Espanyol recordó al Mallorca del pasado año. Le faltó pegada en fases claves del partido, ya que a pesar de jugar con cuatro delanteros natos -Benítez, Esnáider, Posse y Quique Martín- apenas inquietó a Roa. Esnáider lo intentó en el minuto 8 clavando un cabezazo que sorprendió muy bien colocado al guardameta mallorquinista.

Al principio, no fue un encuentro generoso con el espectáculo. Cada movimiento de un jugador era anulado por la respuesta inmediata del rival. El público, que disfrutó de una temporada histórica el curso pasado, fue indulgente con los errores y supo reconocer las dificultades que entrañaba el Espanyol. Los rojillos se estrellaron durante muchos minutos contra un equipo que parecía haber fotocopiado sus genes. En varias fases del partidos los isleños combatían a su propia sombra. Hasta que apareció Stankovic. El jugador yugoslavo, que ha sido convocado por su selección para jugar ante Brasil por primera vez en su carrera deportiva, quiso estrenar internacionalidad con una jugada infalible: regate seco y centro que Dani no desaprovechó. El punta local se está volviendo letal en este tipo de acciones, ya que dos de los tres goles que lleva en el Mallorca los ha marcado de idéntica forma.

Bielsa quiso variar la fisonomía de su ataque en la segunda parte. Situó a Nan Ribero, un extremo nato, en el lugar de Benítez. Además, retrasó unos metros a Esnáider y colocó en punta a Posse. Pero volvió a surgir Stankovic, esta vez desde el córner, para colocar un balón que Chupa López transformó en el segundo gol mallorquinista.

El resto fue simple trámite: el Mallorca, sin prisas, protegiendo su zona defensiva y dejando correr el reloj, sobre todo tras perder por lesión a Ibagaza, y el Espanyol, a la desesperada, con muy pocos argumentos ofensivos.

Ibagaza, lesionado

El equipo de Cúper demostró que está preparado para afrontar el debú en la Recopa de Europa el próximo jueves ante el Herst de Escocia. Ha perdido a su cerebro, el argentino Ariel Ibagaza -estará dos meses de baja tras la lesión que sufrió ayer-, pero demostró que es un equipo solvente y con capacidad para sacar adelante su primer compromiso europeo. El Espanyol, por contra, rebajó la poderosa imagen con la que arrancó la temporada. Su entrenador se quejó tras el encuentro de los pocos argumentos ofensivos de su equipo para abrir defensas muy cerradas. Bielsa prometió que en los próximos días trabajará para corregir el problema.