La Junta prevé ayudas de hasta 600.000 pesetas por cada empleo que genere la semana de 35 horas

La Junta correrá con los gastos de la reducción de la jornada laboral en el sector privado. Los empresarios podrán recibir ayudas de entre 300.000 y 600.000 pesetas por cada nuevo contrato que se genere por la implantación de la semana laboral de 35 horas. La medida forma parte del borrador del decreto para incentivar la reducción de la jornada, presentado ayer por el consejero de Trabajo, Guillermo Gutiérrez, a UGT y CC OO. El titular de Trabajo, para asegurarse el respaldo sindical, aceptó la exigencia de que el futuro decreto afecte a los sectores público y privado.

Las negociaciones se iniciarán la próxima semana, una vez que el borrador sea presentado a la patronal. A la Junta no le resultará fácil diseñar un decreto para fomentar que los trabajadores andaluces tengan una semana laboral de 35 horas, a gusto de sindicatos y empresarios. El proceso negociador con los agentes sociales y económicos resultará "complicado y largo", admitió el secretario general de UGT-Andalucía, Manuel Pastrana. Los sindicatos, minutos después de conocer el contenido del borrador presentado por Gutiérrez, pusieron sobre la mesa su condición innegociable de que los planes del Ejecutivo andaluz abarquen medidas para incentivar la reducción de la jornada y la creación de empleo en los sectores público y privado. Asimismo los dirigentes sindicales advirtieron de que el proceso negociador será "largo", ya que los sindicatos no tienen "la más mínima intención" de aceptar un futuro decreto que pueda cuestionar la efectividad de una "buena medida" como es la generación de empleo a través de la aplicación de las 35 horas semanales, indicó Pastrana. Actitud de los empresarios Una vez desvelada la posición sindical, sus máximos representantes destacaron la "sintonía" existente con las propuestas elaboradas por la Junta para convencer a los empresarios de la idoneidad de implantar en los centros de trabajo la jornada de 35 horas. Éstas se centran en cuatro supuestos: ayudas directas de entre 300.000 y 600.000 pesetas por cada empleo generado a través de la reducción de jornada y de la disminución de horas extra. También podrán acogerse a dichas subvenciones a fondo perdido aquellos contratos que se realicen a tiempo parcial con carácter indefinido y los contratos de "relevo". Sin embargo, la cuantía a percibir por los empresarios es aún materia negociable que podría sufrir variaciones en el diálogo entre Junta, sindicatos y patronal. El titular de Trabajo hizo votos para que las negociaciones culminen a principios de noviembre, para que el futuro decreto pueda ser una realidad antes de que finalice el año. Menos prisas mostraron los sindicatos. Pastrana señaló que "no debe haber precipitación", ya que se pretende consensuar una reforma "de tal calado" en la creación de empleo que cualquier medida "debe ser analizada detenidamente". Los empresarios se incorporarán próximamente a la escena negociadora. Guillermo Gutiérrez iniciará el miércoles las negociaciones con el presidente de la patronal, Rafael Álvarez Colunga. Las organizaciones sindicales ya le han solicitado a Gutiérrez que convenza a los empresarios de la necesidad de mantener una "actitud abierta" en relación a las 35 horas semanales. Sólo así podría hacer modificar la tesis sostenida hasta ahora por la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), que rechaza un recorte de la jornada laboral por entender que no genera empleo y hace peligrar la competitividad del tejido productivo andaluz. Para el secretario general de CC OO-Andalucía, Julio Ruiz, sería conveniente que la patronal "abandone de una vez la rigidez" que mantiene hacia este tema.