El Manchester acepta los 156.000 millones de Rupert Murdoch

Rupert Murdoch mostró la tarde del pasado martes sin rubor sus poderes a la junta directiva del Manchester United. En una maniobra propia de su reputación, el osado dueño de BSkyB aumentó la cuantía de su oferta a casi 625 millones de libras (156.000 millones de pesetas) y lanzó un ultimátum. Si el trato no era cerrado a las cinco, retiraría la propuesta. Repartidos por distintos despachos de Londres, los ejecutivos intercambiaron llamadas y mensajes hasta lograr un acuerdo unánime.

La pelota -nunca mejor dicho- está ahora en el campo del Gobierno laborista. Si éste no observa conflictos de interés o competencia desleal, será la primera vez que un magnate televisivo adquiera un club de fútbol en el Reino Unido.Hace menos de una década, Martin Edwards, presidente del Manchester United, trató de venderlo por 20 millones de libras (5.000 millones de pesetas). No lo logró, pero a cambio transformó el equipo en un negocio redondo. Cuando ayer se sentó junto a Mark Booth, director ejecutivo de BSkyB para anunciar el acuerdo, su rostro cansado dejaba traslucir la tensión de las últimas horas. "Hemos logrado un acuerdo excelente que afianzará al Manchester en el mundo del fútbol sin traicionar con ello a nadie", dijo. En clara alusión a los desolados fans añadió luego que su familia lleva 33 años al frente del club y nadie abandonará su puesto. "La opinión del aficionado es importante, pero nosotros defenderemos como hasta ahora los intereses del equipo".

Con aspecto mucho más relajado, Mark Booth subrayó cada sílaba dirigida también a la hinchada. "Los aficionados quieren ver buen fútbol; BSkyB también. Desean ganar la Liga y tener a los mejores jugadores; lo mismo busca BSkyB. La era digital aumentará el poder del fútbol y la cadena y el Manchester estarán en la brecha", concluyó triunfante.

Más crispados que nunca, los seguidores del club ofrecieron de inmediato su versión de los hechos. "Hay que impedir la venta como sea. El Manchester no puede perder su independencia", advirtió su Asociación. Molesta por la especulación financiera desatada por un club que ella prefiere seguir llamando sólo deportivo, sus portavoces llegaron a calificar el trato de "un mal negocio". Anoche un grupo de ellos se manifestó antes del partido que el Manchester disputó contra el Charlton Athletic.

La Bolsa, que ha recibido ya el anuncio oficial del acuerdo, experimentó una jornada frenética después de que la incertidumbre amenazara con hacer bajar de golpe las acciones del equipo. Los 50 millones más de libras (12.500 millones de pesetas) ofrecidos por Murdoch han fijado su valor en 240 peniques.

Al comprar el Manchester United, BSkyB protege sus propios intereses en la transmisión exclusiva y en directo del fútbol televisado. Incluso si los clubes británicos fueran forzados a negociar por sí solos dichos derechos, Murdoch contaría todavía con un as. El equipo es el más popular y poderoso del país. En el peor de los casos, su cadena podría vender a una audiencia que ha demostrado su avidez.

El destino del Manchester puede inclinar también a otras emisoras. El rotativo The Times, parte del emporio Murdoch, apuntaba ayer que Carlton Communications puede estar interesada en el Arsenal. Dicho equipo arrebató el pasado año la Liga al propio Manchester. Canal Plus, la compañía francesa propietaria del Paris Saint Germain, o Granada, con participación en BSkyB, podría explorar también el mercado de los derechos de transmisión.