11.000 andaluces emigran al sur de Francia para ganar una media de 200.000 pesetas en la vendimia

Unos 15.000 trabajadores españoles, de los que más de 11.000 son andaluces, se están desplazando durante estos días al sur de Francia para participar en la vendimia, según informaron ayer los responsables de la Federación de la Tierra de la Unión General de Trabajadores (UGT) Jesús García y Antonio Moreno. Los vendimiadores españoles proporcionarán unos beneficios totales de unos 3.500 millones de pesetas y ganarán por cabeza una media de 200.000 pesetas. La cifra de vendimiadores españoles mantiene la misma tónica de los últimos años, aunque con un número ligeramente mayor de emigrantes, dado que los propietarios de vides franceses han decidido prescindir de los procesos mecánicos para la producción del vino al descender la calidad con este método. Andalucía es con creces la comunidad que más emigrantes aporta a la vendimia francesa, con 11.000 trabajadores, frente a los 2.000 de la comunidad valenciana o los 1.000 de Murcia. Granada, con 3.500 personas, es la provincia andaluza que ofrece el mayor número de desplazamientos al sur de Francia. Acudir con contrato Tanto Jesús García como Antonio Moreno volvieron a advertir ayer que ningún trabajador se dirija a Francia si antes no tiene un contrato firmado y certificado, ya que una vez allí le será muy difícil conseguir un trabajo. También aconsejaron que el viaje se haga con el transporte regular que se ha establecido, y no con vehículos propios. El sueldo que cobrarán los vendimiadores, dependiendo de la función en la vendimia, oscilará en las las 1.029 y las 1.149 pesetas por hora, lo que supondrá unos beneficios medios de unas 200.000 pesetas para cada trabajador al final de la campaña. Es también tradicional que los propietarios de las viñas paguen con dos litros de vino por día trabajado. Los más de 3.500 granadinos que este año se han desplazado para trabajar en la vendimia francesa percibirán en conjunto en torno a 800 millones de pesetas, según informó Moreno. Moreno señaló que la mayoría de los trabajadores granadinos proceden de dos de las comarcas más deprimidas de la provincia: Los Montes y Baza, y agregó que suelen ser familias las que acuden anualmente a la vendimia con sus hijos "para conseguir algunos ingresos con los que pasar el invierno". El 70% de los vendimiadores tiene una edad comprendida entre los 35 y 60 años, aunque en los dos últimos años se ha registrado un incremento de trabajadores jóvenes, de 18 a 25 años, y, sobre todo, de mujeres. La Junta de Andalucía ha vuelto también a poner en marcha este año su sistema de guarderías para que los hijos de los trabajadores sean atendidos en sus respectivas zonas mientras éstos participan en la vendimia.