¿Vigilantes de coches?

La noche del pasado sábado (1/8/98), después de disfrutar todo el día de las playas de El Puerto de Santa María, un grupo de 10 amigos decidimos ir a divertirnos a los lugares de moda de la noche portuense, y tras visitar varios lugares nos dirigimos a una zona de mucha marcha que es la que está situada en Puerto Sherry. Al llegar nos quedamos asombrados por la cantidad de coches que allí había y, por lo tanto, la falta de aparcamientos. Nos llevamos el coche a una zona de aparcamiento vigilado, no sé si por una asociación de parados, por una empresa privada o por el Ayuntamiento, porque la verdad nos dieron un ticket y no lo leímos. Todo esto, después de pagar, por supuesto. Allí había un montón de "supuestos vigilantes" con petos fluorescentes y silbatos en ristre que lo único que hacían era cobrar el "tributo o impuesto" por dejar el coche. Cuando cogimos el coche para irnos de vuelta a casa nos dimos cuenta de que nos habían robado los tapacubos. Fuimos a ver uno de los vigilantes y le contamos la historia y el buen hombre nos respondió: "¿Qué le hago yo?". Yo les pregunto: ¿para qué están ustedes, sólo para cobrar y tocar el silbato? ¡Qué cara más dura tienen! Además, no nos trajimos unos tapacubos porque no servimos para robar, porque la verdad, allí la vigilancia brillaba por su ausencia.-