_
_
_
_

El IEC inicia la renovación de su sede en el antiguo hospital de la Santa Creu

Equipado con un casco y un martillo neumático, el presidente del Institut d"Estudis Catalans (IEC), Manuel Castellet, dio ayer el pistoletazo de salida a las obras de rehabilitación y restauración de la sede del instituto, situado en la Casa de Convalescència del antiguo hospital de la Santa Creu. Después de 20 años del regreso del IEC a este edificio, construido entre los siglos XVII y XVIII, sus responsables han promovido una intervención respetuosa con su aspecto original y pondrán fin a su deterioro.

El proyecto arquitectónico, diseñado por Ángel Valdés, ha querido ser absolutamente fiel a la estructura original de un edificio cuya historia se remonta al siglo XVII y que fue declarado bien de interés cultural en 1931. Por ello, los responsables de la rehabilitación han contado con la supervisión de expertos en patrimonio de la Generalitat y del Ayuntamiento, y han adoptado "un esquema estético unitario", según Valdés. El presupuesto total es de unos 865 millones de pesetas, aportados en sus dos terceras partes por la Generalitat. El tercio restante estará a cargo de entidades privadas y del Ayuntamiento, que ha asumido los gastos del anteproyecto como propietario del edificio. El Ministerio de Fomento se ha comprometido a invertir una cifra aún por determinar. El IEC ocupó la Casa de Convalescència desde 1931 hasta 1939, recordó ayer Manuel Castellet, y regresó con la llegada de la democracia, en 1977. Durante estos últimos 20 años, el centenar de trabajadores y los socios del IEC han convivido con humedades, carcoma y otras incomodidades derivadas de unas infraestructuras deficientes y anticuadas, una circulación caótica y unas instalaciones eléctricas desfasadas. Desde ayer, tendrán que hacerlo con unas obras que se prolongarán durante dos años. Los espacios más emblemáticos de la casa, el claustro y el jardín, serán objeto de intervención en la primera fase de las obras. Ángel Valdés explicó que la cerámica del claustro, afectada por la humedad, será arrancada y restaurada sólo en parte, "porque hay trozos que tendrán que ser sustituidos". El jardín, que lleva el nombre de la escritora Mercè Rodoreda, situado en el primer piso, verá modificada su estructura para volver a tener su forma original. El añadido, en la década de 1920, del puente sobre la calle de Egipcíaques que lo une al Centro Superior de Investigaciones Científicas, había modificado la situación de las jardineras. El arquitecto ha previsto también la impermeabilización del suelo para permitir la instalación de las oficinas de administración del centro en el nivel inmediatamente inferior, la planta baja. En la capilla, situada en uno de los ángulos del primer piso, no se intervendrá porque sus pinturas están siendo restauradas aparte. La galería que unirá las futuras oficinas con el claustro albergará una serie de esculturas de Josep Llimona guardadas hasta hoy en las dependencias del IEC. La casualidad ha querido que estas obras coincidan con las de otra casa de convalescència, la del hospital de Sant Pau, de Domènech i Montaner, sucesor del antiguo hospital, que será convertida en un centro de investigación en ciencias de la salud por la Universidad Autónoma de Barcelona.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_