Una ambiciosa versión del "Tirant" abrirá el festival medieval de Elche
Un ambicioso montaje basado en el clásico de la literatura catalana Tirant Lo Blanch, de Joanot Martorell, inaugurará la producción propia del Festival Internacional de Música y Teatro Medieval de Elche, que entrará el próximo octubre en su quinta edición. El proyecto cuenta con tres millones de presupuesto y ha sido confiado al director teatral ilicitano Pepe Miravete, quien adaptará la versión que ha escrito Antonio Amorós, que a la par de autor teatral es concejal del Ayuntamiento de Elche.
Pepe Miravete acoplará el texto escrito a partir de la novela de Joanot Martorell por Amorós a las posibilidades escénicas que ofrecen las calles y plazas de la antigua villa amurallada de Elche, mientras que el actor Javier Rico, antiguo integrante de La Carátula se estrenará en las labores de producción. Una vez definido el montaje y puesto a punto, la convocatoria se trasladará al viernes 30 de octubre a las 12 de la noche en la Plaça de Baix (frente al Ayuntamiento), tras la representación extraordinaria del Misteri que tiene lugar cada dos otoños en Elche. A partir de allí, unas 200 personas participarán en el montaje y animarán la ambientación medieval buscada encarnándose en juglares, titiriteros, zancudos, gegants y otros elementos escenográficos de envergadura. La Coral Ilicitana, El Group de Danses y Cançons d"Alacant, grupos de música antigua y de dolçainers i tabaleters cubrirán el apartado musical y actuarán en diferentes escenarios al aire libre dispuestos estratégicamente en este gran montaje. El director Pepe Miravete quiere resaltar la vertiente épica de este Tirant y para ello piensa utilizar todas las técnicas del teatro. La idea es crear un espectáculo total de casi tres horas de duración donde los viajes del protagonista a las diferentes cortes que visitó puedan ser representados en plena calle con el concurso de dragones, batallas navales en el Carrer Major de La Vila que se vestirá de Mediterráneo para la ocasión, atronadores cañonazos de confetis, toque de clarines, embajadas de moros y hasta torneos a caballo. Menos intimista La parte más teatral de la obra, en el sentido tradicional del término, tendrá lugar frente a la puerta principal de la Basílica de Santa María. Se ha querido recuperar así el espacio que constituyó seguramente el primer escenario de la ciudad. El director destaca el optimismo de Joanot Martorell que escribe una exaltación de la cristiandad en un momento histórico difícil; de hecho, en la obra de Antonio Amorós la Iglesia está siempre presente con un planteamiento mucho menos intimista y lineal que en la versión escrita por María Aurelia Capmany. También se representarán en Elche algunas de las escenas de amor que aparecen en la novela de Martorell con una fuerte carga erótica, pero aquí con un carácter divertido rayano en el bodevil. Este complejo espectáculo, que será montado en apenas tres meses, nace con la intención de seguir representándose en ediciones futuras del Festival de Música y Teatro Medieval, en las que se perfilará su forma definitiva.
