Empate a uno tras el primer asalto ante Estados Unidos

Arantxa no falló. Se complicó su partido más de la cuenta. Pero al final su garra volvió a ser decisiva. Arantxa ganó a Lisa Raymond, segunda jugadora de su equipo, por 6-7 (4-7), 6-3, 6-0 en algo más de dos horas. Sin embargo, no pudo evitar que Estados Unidos y España mantengan la igualdad tras la primera jornada de la semifinal de la Copa Federación que les enfrenta en el Club de Campo de Madrid. Conchita Martínez perdió ante Monica Seles, quinta jugadora mundial, en el segundo encuentro, por 6-3, 3-6, 6-1. El guión se siguió al pie de la letra. Hoy (17.30, La 2) Arantxa y Seles se enfrentarán en el primero de los tres encuentros que cerrarán la eliminatoria. Le seguirán el Conchita-Raymond y el doble. En la otra semifinal, Suiza aventaja a Francia por 2-0.A Arantxa le costó adaptarse a la altura de Madrid. Jugó un primer set titubeante y el partido se le complicó en la parte final de la manga inicial y los inicios de la segunda. Teóricamente no debía tener problemas, pero se convirtió en una pequeña odisea. Arantxa logró enganchar al público a un partido sin historia. Raymond, 19ª jugadora mundial, no tenía forma de complicarle la vida a Arantxa a no ser por los propios errores de la española. Y, sin embargo, mantuvo a la número cuatro del ránking mundial bajo control, ganándola por un set y disponiendo de tres bolas de rotura para colocarse con 3-0 en la segunda manga.

Fue el momento más difícil para Arantxa. Pero, en cambio, detonó la espoleta que necesitaba la española para comenzar a imponer su mayor calidad. "No me estaba sintiendo a gusto. No me adaptaba bien a la altura. Las bolas me volaban y me costaba imponer mi juego", señaló Arantxa. Hasta entonces, su saque no había funcionado y eso la había llevado a cederlo cinco veces de las siete que lo había defendido. Afortunadamente, Raymond tampoco encontró en este golpe su mejor defensa. La americana siempre fue más vulnerable con su saque que en el resto. Por eso ambas tenistas se vieron enroladas en un desempate, que se adjudicó la americana, en la primera manga, tras haberse roto el saque ocho veces.

Lo único que cambió a partir de entonces fue que Raymond acusó más el esfuerzo y Arantxa estuvo más sólida. El saque de la española no mejoró. Arantxa siguió afrontando bolas de break en casi todos sus servicios. Pero esta vez los ganó. El juego más significativo fue el segundo del tercer set, en que Raymond tuvo cuatro break-points antes de perderlo.

"Ha sido un partido difícil", comentó Arantxa, que dedicó su victoria a Alba, la hija de su hermano Javier nacida el viernes. "Pero creo que me irá bien para afrontar a Seles". Arantxa ha perdido con Seles 14 veces y la ha ganado sólo tres. Pero su último duelo se produjo en la final de Roland Garros y supuso el cuarto Grand Slam para la española. "No creo que este partido suponga una revancha de París", agregó Arantxa. "Aquí somos un equipo que disputa cinco puntos. Y la cuestión es ganar tres".

Conchita perdió ayer una de estas posibilidades. Disputó un buen partido frente a una Seles sobrada de peso, pero acabó rendida en la tercera manga. La primera se decantó del lado de la estadounidense con un solo break en el octavo juego (5-3). Sin embargo, fue la segunda la que deparó mejor nivel y más emoción. Conchita la bordó. Sacó del zurrón aquel drive que le permitió ganar Wimbledon en 1994, y encontró las respuestas a los ataques que constantemente lanza Seles. Su excelente trabajo pudo pasar inadvertido como consecuencia de su deficiente servicio. Con 5-3, afrontó tres bolas de rotura antes de adjudicarse la manga.

Una pena

Allí dejó la aragonesa todas sus naves. Cuando entró en el tercer set estaba cansada. "Fue una pena no poder aguantar el mismo ritmo que en las anteriores mangas", comentó Conchita. "Pero pienso que jugué un gran partido". La española sólo se anotó su saque una vez en la tercera manga. Seles, en cambio, ganó con comodidad. Fue su 13ª victoria sobre la aragonesa, por una sola derrota. "No creo que eso me afecte mañana", concluyó Conchita. La victoria de Seles dio bríos al equipo de EEUU. "Estamos como al principio", dijo Billie Jean King, su capitana. "Puede pasar todo. Pero Monica jugó increíble. Eso me da confianza".Los dos partidos fueron presenciados por Esperanza Aguirre, ministra de Cultura, que inauguró la jornada ofreciendo la medalla de oro al Mérito Deportivo a la legendaria tenista Lilí Alvarez, fallecida el pasado día 8 de julio.